De acuerdo con publicaciones de medios argentinos, la madre de la menor la llevó al Hospital Notti debido a las constantes infecciones urinarias que padecía y por haber presentado una erupción en la piel.
Los profesionales de la salud notaron varias reacciones en la niña y sospecharon que había sido víctima de abusos. Sin embargo, fue el testimonio de la menor que llevó a los médicos a comprobar el terrible caso.
Durante una de las consultas y debido a la ausencia de la madre, los médicos realizaron los exámenes de rutina y algunos especialistas indagaron a la menor sobre los motivos por los cuáles se orinaba constantemente durante las noches y se indignaron con lo que la víctima les relató.
La niña explicó a los especialistas de la salud que le daba miedo la oscuridad debido a que en las caricaturas de Bob Esponja el padre se mete en su cama y le toca en sus partes íntimas. Pero fue aterrado cuando agregó que su papá le hacía lo mismo y que era “un cochino y habría que atarle las manos”.
Los médicos interrogaron a la madre de la menor para verificar si estaba enterada, pero negó todo e intentó llevarse a su hija. Sin embargo, los médicos no lo permitieron y denunciaron que la menor había sido víctima de abuso sexual.
Según los reportes, se abrió una investigación a cargo del fiscal de Delitos Sexuales Gustavo Stroppiana y días después ordenó la detención del padre de la niña y lo imputó por abuso sexual gravemente ultrajante agravado por el vínculo.
Debido a que no encontraron vínculos de complicidad, la madre sigue con la custodia de su hija y hasta el momento, la niña no está apta para declarar porque consideraron que está siendo manipulada.
Se reveló que, en entrevistas preliminares, la niña ahora dice que todo es mentira y que su papá “es bueno”. Sin embargo, la jueza Carolina Colucci le dictó la prisión preventiva al papá de la menor, por lo que permanecerá recluido en el penal mientras avanza la investigación.