Regularmente cuando hablamos de fracaso se nos eriza la piel. Todos le tememos y todos queremos huir de él. Mientras más lejos, mejor. La cultura y la formación que recibimos nos hacen sentir, realmente, como fracasados cuando este llega a nuestra vida. Incluso tenemos epítetos para ello, nos decimos "perdedores", "loosers", "fracasados", pero lo peor es que aceptemos el epíteto. Y nos cuesta superarlo más que nada por la burla de los que nos ven caer. Muchos disfrutan ver que caemos y mejor aún que nos cueste levantarnos.
Estamos a poco más de 48 horas para iniciar un nuevo año: el 2014. Y cada año que termina nos deja alegrías, logros y éxitos, pero también deja tristezas, dolor y fracasos. En la mayoría de nosotros prevalece lo negativo del año anterior y condiciona al año nuevo. Debemos cambiar de mentalidad. Sugiero 10 nuevos propósitos: 1. Vivir "hoy". Aprender del pasado para proyectar un buen futuro, sin perder de vista que el pasado sirve de aprendizaje y experiencia para hacer un mejor mañana. 2. Desarrollar el talento. Talento es inteligencia triunfante,