La Responsabilidad Social Corporativa en tiempos de pandemia es llevar a Guatemala siempre hacia adelante

Las empresas tienen obligaciones y responsabilidades ante su comunidad inmediata y la sociedad en general conocidas como “Responsabilidad Social Corporativa” (RSC), y en esta época de pandemia han demostrado que su rol es determinante para mitigar los dañinos efectos sociales y económicos generados por el covid-19.

RSC: tendencia global ¿Qué genera lealtad del consumidor? La globalización ha contribuido a profundizar este tema definiendo indicadores mundiales que distinguen a las empresas que contribuyen de manera voluntaria a mejorar la calidad de vida y a proteger el medio ambiente. El impacto de las marcas comprometidas con la vida verde del planeta y con aspectos sociales de su comunidad, se relaciona con la simpatía, lealtad y preferencia de los consumidores sobre otras empresas que no contribuyen o que no siguen los estándares y normas propias de la RSC. ¿De qué se trata la Responsabilidad Social Corporativa? La Responsabilidad Social Corporativa se traduce en iniciativas sociales y ambientales integradas a las operaciones de producción y comerciales para generar un impacto benéfico ante sus clientes, empleados, accionistas, comunidades que les rodean y medio ambiente. El Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible (World Business Council for Sustainable Development), define que la empresa socialmente responsable asume el compromiso de contribuir al desarrollo económico sostenible procurando una mejor calidad de vida para sus empleados, sus familias, la comunidad local y la sociedad. Una empresa socialmente responsable se distingue por:
  • Cumplir las normas gubernamentales y van más allá de la legislación al emprender acciones que aportan un valor adicional a la comunidad, aunque, legalmente no sea una obligación.
  • Las iniciativas que se impulsan basadas en los principios de la RSC se promueven por los directivos y consejeros de las empresas de manera voluntaria.
  • Las acciones se relacionan con la promoción de mejoras relacionadas con temas ambientales, sociales y económicos.
Las iniciativas desarrolladas en la RSC son multidimensionales:
  • Derechos Humanos.
  • Intereses de los consumidores.
  • Coberturas en salud pública, familiar y personal.
  • Innovaciones en cultura, educación y vida verde
  • Protección y regeneración ambiental.
  • Sentido amplio de transparencia, donde, se combate con eficiencia el fraude y la corrupción.
  • Prácticas internacionales de trabajo y empleo.
La ética y los valores distintivos de la empresa sostenible y responsable: Prestigio corporativo La imagen empresarial es determinante para una buena reputación, pero cuando por alguna razón se daña no se permite solucionar la crisis aludiendo a las iniciativas de la RSC, de ahí que la reputación institucional de la empresa se debe sustentar en el patrimonio propio de los valores corporativos. Diversidad de ideas y conocimiento  Una organización socialmente responsable aprovecha la diversidad de ideas y creencias para integrar diferentes puntos de vista las agendas corporativas que conlleven a innovar y crecer como empresa al tiempo que procuran el desarrollo de la comunidad. Confianza en los colaboradores  El control excesivo sobre los grupos de interés puede desmotivar las acciones afectando el rendimiento, por lo que, la confianza en los empleados es necesaria para la productividad y logro de objetivos en las empresas que promueven la RSC. La RSC en tiempos de pandemia La Pandemia del Covid-19 retó a las empresas a enfrentar fuertes desafíos y a descubrir soluciones inmediatas para ayudar a las comunidades a sobrellevar las crisis de salud y económicas. La mayoría de los gobiernos estaban imposibilitados de definir acciones concretas para mitigar los efectos y la propensión del Coronavirus. En parte por falta de conocimiento, o por la falta de recursos económicos, de planeación… en fin, la pandemia los sorprendió. Las comunidades locales y la humanidad entera se enfrentaban de lleno a propagación de contagios de covid-19 y las estrategias de combate y contención no estaban a la vista. Por fortuna las empresas socialmente responsables respondieron y fueron solidarias con sus comunidades inmediatas. Apoyaron a las colonias y vecinos que les rodean e inclusive extendieron su ayuda a otras regiones. Grupos de personas desprotegidas y vulnerables durante meses recibieron asistencia médica y programas completos de alimentación diaria que las empresas les hacían llegar a la puerta de sus casas. Se redefinieron nuevos estilos de trabajo desde el hogar, apoyando a sus empleados con equipos de cómputo y servicios de Internet. Colaboraron con los sistemas de salud repartiendo cubrebocas, medicamentos, instalando lava manos y desinfectantes en vías públicas, aportando equipos de protección especial para los médicos y enfermeras, acercando transporte a los sospechosos de contagio para trasladarlos a los hospitales. Sus líneas de acción fueron muchas y muy eficientes. La pandemia permitió que empresas, gobiernos y sociedad civil trabajaran de la mano y en equipo buscando el bien común de los ciudadanos. Demostró que la capacidad de coordinación y subsidiariedad es posible implementarla para promover el bienestar comunitario. Las Empresas Socialmente Responsables fueron quienes más rápido respondieron a las emergencias derivadas del covid-19, por la cultura organizacional que les respalda y la visión de generar bien común en el marco cotidiano de sus acciones. Las empresas socialmente responsables siguen los principios básicos de la norma ISO 26000, definidos por la Organización Internacional de Normalización: Rendición de cuentas  Las organizaciones que generen actividades de Responsabilidad Social Corporativa se someten de manera voluntaria a la rendición de cuentas por parte de las entidades certificadoras. Transparencia La información derivada de las actividades de RSC se comparte con grupos de interés, por lo que, la transparencia es un principio fundamental en el desarrollo de cualquier proyecto. Código de ética La honestidad, la equidad y la integridad son valores asociados al comportamiento ético de las empresas y de todos sus públicos relacionados con sus acciones.  Es mandatorio respetarlos por encima de cualquier beneficio. Stakeholders En la toma de decisiones respetan los intereses de los stakeholders (grupos dentro de una empresa que tienen objetivos propios: accionistas, empleados, directivos, etc), de ahí que están obligadas además de responder a los accionistas o inversores, a cuidar los intereses y beneficios de las partes interesadas. Legalidad Basados en el principio de legalidad, todos los involucrados en actividades de RSC deben garantizar el cumplimiento de la normatividad vigente. Local e internacional Además de cumplir con las normas locales, las empresas deben cumplir la normatividad internacional en materia ambiental y social, aun cuando las leyes de su país no lo exijan. Derechos Humanos Los derechos humanos son universales, por tanto, se deben respetar independiente de los huecos legales o fallas locales que no los garanticen.