La proteína es el pilar de la nutrición en perros y gatos. Sin importar la raza, edad o nivel de actividad, su calidad y cantidad determinan el desarrollo muscular, la inmunidad y la energía de las mascotas. Roxana Ximena Cibrián, médica veterinaria de Dana Hospital y Clínicas Veterinarias, explica cómo elegir la ideal para cada etapa de vida y evitar problemas de salud a futuro.

Los perros y gatos tienen un origen carnívoro, por lo que su dieta debe basarse principalmente en proteínas. “Son la materia prima para formar el cuerpo, los órganos, músculos y anticuerpos”, explica Cibrián. En etapas como el crecimiento, la gestación y la lactancia, la demanda es aún mayor, ya que el organismo necesita recursos para desarrollarse y defenderse de enfermedades.

ORIGEN ANIMAL Y VEGETAL: ¿CUÁL ES MEJOR?

La veterinaria señala que las proteínas de origen animal tienen un perfil de aminoácidos más parecido al de las mascotas, lo que las hace más digeribles y aprovechables. Las mejores fuentes de este tipo de proteína son la carne de pollo, pavo o res (alto contenido proteínico y fácil digestibilidad); pescado, como salmón, atún y sardina (contienen ácidos grasos omega-3, excelente para la piel y articulaciones); y el huevo.

Las proteínas vegetales, en cambio, suelen ser incompletas y más difíciles de digerir. “Si solo se alimenta con proteína vegetal, sí van a haber deficiencias nutricionales”, advierte. Entre las fuentes vegetales de proteína se encuentran las legumbres, granos
y semillas.

DESARROLLO, DEFENSAS Y ENERGÍA

La proteína no solo forma músculo: también es esencial para el sistema inmunitario y la producción de energía. Cibrián detalla que, en carnívoros, buena parte de la energía diaria proviene del metabolismo de la proteína y la grasa. Además, sin aminoácidos esenciales, no se producen anticuerpos ni células de defensa de forma óptima, lo que deja al animal vulnerable.

ETAPAS DE VIDA Y NECESIDADES

En los primeros tres meses, los cachorros requieren la mayor cantidad y calidad de proteína. De los 3 a 6 meses, la demanda seguirá siendo alta, y al llegar al año se ajustará a una dosis de mantenimiento. En adultos mayores, la proteína seguirá siendo vital, pero en formulaciones más fáciles de digerir, para no sobrecargar riñones e hígado.

CÓMO IDENTIFICAR PROTEÍNA DE CALIDAD

En el empaque, los dos primeros ingredientes representan más del 50% del contenido. Si predominan fuentes vegetales o subproductos de baja calidad, la proteína será menos útil. Cibrián recomienda buscar “carne” o “harina de carne” como ingrediente principal y ajustar la cantidad diaria según el peso real de la mascota, siguiendo la tabla del fabricante.

Invertir en proteína de calidad es invertir en salud a largo plazo. “He visto más problemas hepáticos y digestivos en animales alimentados con proteína vegetal que en los que reciben proteína animal de buena calidad”, concluye Cibrián.

Mi Vet dice...

Asegúrate de que la proteína principal del alimento de tu mascota sea de origen animal y ajusta la cantidad según su peso y etapa de vida; así mantendrás sus músculos, defensas y energía en perfecto estado.