Sierra observó que con mucho amor ambos se comunican en q’eqchi’, luego la mujer destapa un recipiente de plástico en el que lleva comida caliente. Explica que la madre le da al niño de comer en la boca y por momentos el menor se sirve el alimento en una tortilla.
Resalta que la madre con paciencia y orgullosa observa a su hijo alimentarse; además, le arregla su camisa para que su presentación mejore.
Explica que luego en un pachón lleva la bebida y se la da al niño, quien es su único hijo.
Imagen viral
Sierra les tomó una fotografía y en pocas horas se volvió viral la imagen, con más de 109 mil vistas, al menos 675 veces compartida, 470 comentarios y 6 mil 854 me gusta.
El viernes último, Prensa Libre llegó a la escuela y observó a través de la malla como el niño recibía sus alimentos. Los maestros y compañeros saben que llega la mujer, quien aunque esté lloviendo no le impide compartir con su pariente.
“Sea urbano, rural, ciudad o comunidad, escuela pública o colegio, condiciones económicas estables o precarias el amor de madre no ve condición, situación, ni edad. Honremos a nuestra madre” comentó Sierra al ser contactada y constatar que su imagen fue viralizada.
Imelda Quib Batz está casada con Héctor Coc Pop, quien es mecánico. Ambos cuidan de su hijo Henry Estuardo Quib, quien cursa primero primaria.
Mujer ejemplar
Al ser consultada en q’eqchi’, Imelda comentó que a las 9 horas comienza a preparar la comida que le lleva a Henry, y que lo hace porque no come nada antes de irse a la escuela.
“No quiero que se enferme, por eso lo alimento bien, todos los días vengo, cuando llueve es un poco difícil porque no podemos taparnos los dos, entonces le doy mi sombrilla para que se tape del otro lado de la malla”, indicó.
Al preguntarle qué le prepara de comida a su hijo, comentó que prepara arroz, fideos, papas, queso, hierbas y de vez en cuando si es posible le lleva una porción de pollo y tortillas calientes. “En la escuela le dan atol y pan, pero el niño me dice que quiere su comida para sentirse lleno y con fuerza”, dijo Quib Batz.
“Ya me contaron que una mi foto está en varios lados y llegaron dos personas a mi casa a felicitarme porque cuido a mi hijo”, agregó la ejemplar madre. En el momento de la entrevista un propietario de una panadería que conoció la historia le dijo que le regalará pan para Henry.
Al preguntarle del por qué le daba comida afuera de la escuela a su hijo, dijo que, al inicio le daban permiso de entrar al plantel educativo, pero luego prohibieron el ingreso de padres de familia, por lo que encontró un agujero en la malla en donde le sirve su refacción a Henry.
La mestra de Henry, Zayda Rosales, dijo que de los 15 años que tiene de impartir clases en la escuela, no había visto a una madre tan dedicada como Imelda Quib Batz. “Henry es muy tranquilo, estudioso, va bien en sus estudios, a pesar de que no habla español, pero sus compañeros le traducen en q’eqchi’. Es un ejemplo la madre y ojalá la ayuden porque es de escasos recursos”, explicó la maestra.
