Pereira refirió que se busca reducir la tala ilegal de abeto, en especial el Abies guatemalensis, cuya especie está en peligro de extinción.
Uno de los productores de Chimaltenango, Salvador Pira, contó que en su finca —Caleras Chichavac—, ubicada en Tecpán Guatemala, tiene 20 años de cultivar pinabete.
Pira contó que el cultivo de esta planta no es fácil. “Es sumamente delicado. Por cada libra de semilla germinan unas mil 400 plantas, de estas el 60 por ciento muere en el vivero, el 20 por ciento en la etapa de trasplante y el 20 por ciento restante es el que sobrevive”, indicó.
Control a tala ilegal
Edwin Pereira, del Inab, expuso que para este año esa entidad autorizará de seis mil a ocho mil marchamos a cultivadores de pinabete, para que puedan venderlo legalmente, por lo que no tendrán inconvenientes con las autoridades que tendrán a su cargo el control de este producto; que decomisarán las plantas a quienes sean sorprendidos, mientras las transporten o comercialicen sin autorización.