“El mal olor no nos deja dormir, nos afecta la vista, causa náuseas y dolor de cabeza. Algunos niños sufren hemorragia nasal. Eso empezó desde el miércoles último, por lo que pedimos el cierre inmediato de la planta”, expresó un vecino afectado.
Al notar que ese combustible tenía mal olor decidimos no utilizarlo, pero debido al fuerte olor este se ha expandido.
Juan Noj, recidente del lugar, expresó: “Desde la semana pasada empezamos a sentir emanación de gases similares al propano o gasolina y salen de esa generadora. Pedimos el cese de las labores de la empresa. En mi casa hemos estado durmiendo con las ventanas abiertas porque el olor es muy fuerte”.
Las autoridades de la generadora de energía eléctrica accedieron a que la maquinaria dejara de operar mientras se le encuentra una solución al problema.
Jaime Paredes, abogado supervisor de la empresa, explicó que el problema fue que les llevaron ocho mil galones de bunker en mal estado.
El mal olor no nos deja dormir, nos afecta la vista, causa náuseas y dolor de cabeza. Algunos niños sufren hemorragia nasal.
“Al notar que ese combustible tenía mal olor decidimos no utilizarlo, pero debido al fuerte olor este se ha expandido. La empresa cuenta con todos los permisos y lo vamos a comprobar en la próxima reunión”, afirmó Paredes.
El alcalde de Chimaltenango, Alex Simaj, manifestó que se realizará un estudio ambiental y se revisará la documentación de esa empresa para saber si cuenta con autorización para operar.
“Debido a que la población ya creció y porque las viviendas alrededor de la generadora están muy cercano pediremos que la trasladen a otro lado, ya que es el sentir de población”, añadió Simaj.