El año pasado se registraron 18 mil 923 casos de enfermedades diarreicas. Los registros del 2017 evidencian que los casos han aumentado a la fecha, en 0.40%, según la tasa de población, y que las mujeres son las más afectadas —54% de los casos—.
Petén suroriental, Jalapa y Baja Verapaz son las áreas con mayor incremento de casos de esos padecimientos.
En los últimos días muchas personas en el país sufrieron de diarrea, uno de los síntomas comunes, que incluso obliga a algunos pacientes a ausentarse de sus labores. El calendario epidemiológico del país define como comportamiento normal que durante estos meses prolifere ese tipo de enfermedades, causadas por la ingesta de agua o alimentos contaminados.
- 18 mil 923 casos de enfermedades diarreicas se registraron el año apsado . L
- 0.40% es el aumento este 2017
- 54% de los casos se registran en mujeres
Según la epidemióloga Carol Aldana, del Departamento de Epidemiología del Ministerio de Salud, durante el comienzo del invierno es común que se incrementen los casos de enfermedades como diarreas, hepatitis, intoxicaciones alimenticias, fiebre tifoidea, disentería y rotavirus. Las bacterias más comunes son las de tipo E. Coli, comúnmente adquirida por comer alimentos contaminados con heces fecales.
Síntomas y prescripciones
Las diarreas frecuentes, vómitos o fiebre —mayor de 38 grados o fiebrícula mayor de 37.5 grados— son síntomas que requieren que el paciente se hidrate con suero, no solo con agua, según expertos. Si los síntomas se agudizan es mejor acudir a los servicios de Salud, pues de acuerdo al tipo de infección, los cuadros podrían complicarse.
Aunque mayo y junio son propicios para enfermedades gastrointestinales, según el calendario epidemiológico anual, también se incrementa el riesgo de otras enfermedades como el zika, dengue, chikungunya, malaria, enfermedades respiratorias agudas, enfermedades transmitidas por alimentos y agua, intoxicaciones por plaguicidas, desnutrición aguda e intoxicación por hongos.
Cuidados
Antojarse de algún alimento de venta callejera podría ser de alto riesgo, pues con la lluvia se propagan las enfermedades. La epidemióloga explica que el agua de lluvia acarrea cualquier tipo de desechos por lo que puede contaminarse con microorganismos.
Según Aldana, es vital el lavado de manos antes de la preparación e ingesta de alimentos. Además, recomienda que se consuman solo comidas cocidas, porque aunque se laven los alimentos, si el agua que se utiliza está contaminada se corre el mismo riesgo que comerlos sin lavar o desinfectar.
La experta sugiere que antes de comprar alguna comida en la calle se verifique que esté preparada de forma higiénica.