La iniciativa nació el 29 de enero de 1993, con el nombre del fallecido empresario Ramiro Castillo Love.
“Se ha invertido en muchas vidas”, comenta Carmen Elisa Asturias, gerente de la Fundación, una de las principales cooperantes del Comité Nacional de Alfabetización (Conalfa).
Lea también: Joven emprendedor, con discapacidad, pide ayuda para abrir café internet
Asturias explicó que, según la ley, toda persona es declarada analfabeta a partir de los 15 años, ya que con menor edad se está a tiempo de asistir a la escuela. “Los niveles de analfabetismo se miden a partir de los 15 años. Si tomáramos en cuenta a las personas menores de esa edad, la cantidad sería mayor”, dijo.
La gerente dijo que ese sector sin atención es lo que alimenta el analfabetismo.
Explicó que algunos gobiernos les han permitido atender a niños, pero en la actualidad hay un grupo que asiste como oyente, ya que no pueden otorgarles certificación porque no han alcanzado los 15 años.
Más mujeres
El 70 por ciento de los asistentes a los cursos que apoya la Fundación son mujeres, que en la mayoría de casos asiste con traje regional y con sus hijos en la espalda, en rebozo, lo que también ayuda a que las beneficiadas se vean motivadas a que sus hijos se alfabeticen.
Podría interesarle: Empleo cambia la vida de jóvenes con capacidades especiales
Asturias indicó que están satisfechos con los resultados y que es un privilegio impactar la vida de guatemaltecos de forma positiva en 25 años.
“Estudié en Tecún Umán, San Marcos. Los libros me ayudaron a seguir con mis estudios, y ahora trabajo en la Fundación y curso el quinto semestre de Auditoría en la Universidad Mariano Gálvez. Las oportunidades se deben aprovechar porque abren puertas al futuro y uno puede soñar más alto”.
Las personas culminan el equivalente a la primaria en tres años y en diferentes etapas, pero el desarrollo no se detiene, pues algunos beneficiados se han visto motivados para continuar sus estudios, incluso en la universidad.
La voluntad y el esfuerzo de cada estudiante son los ingredientes que se combinan con los útiles escolares y textos que aporta la Fundación Ramiro Castillo Love, insumos y recursos que se suman a otras capacitaciones.
Aunque no existe censo, según la Fundación, con datos de Conalfa, en el último cuarto de siglo el índice de analfabetismo habría disminuido de 40.59 por ciento a 12.31, gracias al trabajo de la Fundación Ramiro Castillo Love y de otras organizaciones.
Para Asturias ha sido impresionante compartir con los guatemaltecos, pues cada lugar tiene sus costumbres. Más que a leer y escribir, la Fundación, en alianza con otras instituciones, también impulsa el aspecto económico productivo de los estudiantes, quienes, en grupos, reciben cursos de cocina, bisutería, manualidades y elaboración de jalea.
También se impulsa la iniciativa denominada alfabetización informática, con cursos de computación en laboratorios apoyados por alianzas.
Para más información, se puede comunicar al 24203000 o visitar el sitio www.frcl.org.gt.
Contenido relacionado
> Una mujer mujer de Huehuetenango no se conforma con aprender a leer y escribir
> Ahora las mujeres leen más que los hombres en la provincia
> Niños de Tzununá tienen oportunidad de aprender a usar computadoras