Virgina Mosquera, investigadora del Instituto de Investigación y Proyección sobre Ambiente Natural y Sociedad, dijo que los pozos contribuyen a que la recarga de las fuentes subterráneas sea más lenta, por la impermeabilización de los suelos —urbanización y pérdida de bosques—.
Las Vacas, uno de los dos afluentes más importantes de la ciudad, fue declarado en estrés hídrico, porque ya no satisface las necesidades de la población.
- 60% del agua que llega a los hogares se extrae de pozos
- 12 a 15 por ciento ha crecido la población en cinco años
- El 38% del agua que se distribuye en la capital proviene de las subcuencas de los ríos Xayá y Pixcayá
Giovanni Tobar, del Consejo Nacional de Cambio Climático de la Universidad de San Carlos, señaló que una de las principales razones por las que el agua se hace insuficiente es el aumento de la población, que en los últimos cinco años creció entre 12 y 15%.
Agregó que la tendencia de los caudales es a la baja y recomendó implementar campañas de reforestación y proyectos de tratamiento de aguas residuales, para que estas sean reaprovechadas.
El 38% del agua que se distribuye en la capital proviene de las subcuencas de los ríos Xayá y Pixcayá, que nacen en Chimaltenango. Pero cada vez el agua es menos y llega contaminada.
Maynor Caté, gerente de la Mancomunidad de Municipios de la Región Kaqchikel, dijo que en verano esos dos ríos abastecen el 50% del agua de la ciudad. En los últimos años, el caudal ha disminuido 18%, pero aún así produce 400 mil litros por segundo, que benefician a vecinos de las zonas 1, 7, 8 y 11.
“Se sabe que la comuna invierte Q38 millones al año para potabilizar esa agua”, comentó.
El 5 de junio último, Prensa Libre contactó a María José Salas, vocera de la Empresa Municipal de Agua (Empagua), para obtener una postura sobre el tema. Ella pidió que se le enviara un correo electrónico, que no respondió. Además, ayer se le llamó tres veces y no respondió su celular.
Propuesta de conservación
Maynor Caté, gerente de la Mancomunidad de Municipios de la Región Kaqchikel, que trabaja en la conservación de las cuencas de los ríos Xayá y Pixcayá, dijo que han propuesto a la comuna capitalina que por cada servicio de agua se aporte Q1 al mes para construir plantas de tratamiento y reforestar la zona, pero se han negado a escuchar sus sugerencias, pese a que el mayor beneficio es para los vecinos.