“Consideramos que es un abuso de la autoridad, pues solo impusieron el aumento de hasta el 150 por ciento”, expresó Gómez.
Otro afectado comentó que son unos 315 arrendatarios los perjudicados con el reglamento que fue impuesto por el Concejo.
“El reflejo de ese aumento se va a trasladar al comprador, pues si las autoridades no desisten, tendremos que aumentar los precios de los productos que vendemos”, dijo.
El afectado explicó que autoridades anteriores han informado que el mercado es rentable para la municipalidad, pues genera lo suficiente para autosostenerse, por lo que consideran injusto el aumento.
Marta Sosa, quien tiene 20 años de vender verduras y flores en el mercado, asegura que es primera vez que se aumenta el precio de arrendamiento, lo cual considera es un abuso porque nunca se acercaron a dialogar con ellos.
“Es una injusticia que nos suban la tarifa de arrendamiento de los locales, porque las ventas están bajas y no alcanza para pagar más”, manifestó.
Luis Robles, locatario, asegura que no está dispuesto a pagar un aumento de hasta el 150 por ciento de renta. “Exigimos una explicación, pues solo nos dijeron que había que pagar el doble de la tarifa”, refirió.
Robles afirma que hace unos días solicitaron a las autoridades crear una mesa de diálogo con el fin de buscar una solución, pero aún no han tenido respuesta.
Los vendedores aceptan una pequeña alza, pero no como se les está imponiendo, por lo que esperan dialogar con el alcalde para llegar a un acuerdo, pues de lo contrario buscarán otras medidas de hecho.
En ocasiones anteriores el alcalde Carlos Alvarado, ha explicado que el incremento a la tarifa se debe a que faltan recursos para el mantenimiento del mercado.