“Estamos cansados; hemos venido a la municipalidad a suplicar que nos den el recurso, pero no quieren escucharnos”, manifestó la afectada.
Agregó que a raíz de la falta de agua, algunos niños de la colonia El Cerrito del Maíz, sufren de rotavirus, infecciones intestinales y diarreicas. “El alcalde Gerónimo Martínez debe dar las soluciones”, resaltó.
Berta Escobedo, otra afectada, dijo que dos toneles de agua no son suficientes, por lo que vecinos deben caminar largas distancias para buscar a alguien que les regale el líquido de pozos artesanales.
Explicó que Q10 cuesta un tonel de agua en los camiones cisternas particulares, lo que afecta la economía de la población, que en muchos casos no cuentan con un empleo.
Conexiones irregulares
Leonel Martínez, vecino, dijo que en la zona 4 dependen de un nacimiento de agua ubicado en la aldea Cinco Arroyos. Añadió que el descontento también surge, porque les informaron que el manantial se había secado, por lo que se organizaron y corroboraron que sí hay agua.
Subrayó que tras el recorrido descubrieron varias conexiones de la tubería principal hacia la comunidad Las Manzanas, lo que según él, impide que el agua llegue a la cabecera departamental.
“Queremos que aclaren el tema de esas conexiones, porque a Huehuetenango ya no llega el líquido y las autoridades son responsables por este servicio”, expresó.
De acuerdo a lo que han podido indagar los afectados, las conexiones son legales y el problema radica en que ese desvío impide que el agua llegue a las residencias de la ciudad.
En varias ocasiones se intentó conocer la versión del alcalde de Huehuetenango, Gerónimo Martínez, pero no llegó a su despacho y tampoco contestó las llamadas telefónicas.