Añadió que cuando un cerdo o vaca se alimenta en un basurero con facilidad se infesta de parásitos, y debido a que en muchos casos los dueños son de escasos recursos no les dan el tratamiento adecuado y los venden enfermos.
“Hay muchas enfermedades que esos animales pueden contraer en el basurero, como la parasitosis —infestación por parásitos—”, agregó Méndez, quien además recomendó a los vecinos cocinar bien la carne de cerdo antes de comerla.
Para autoridades de Salud, el problema no es la alimentación de los animales, sino la forma como se destazan y maneja la carne.
“Los cerdos se alimentan de muchas cosas y su metabolismo lo asimila, pero si el destace no se hace con higiene, la carne podría contaminarse y perjudicar la salud de la población”, afirmó Jorge Zapata, epidemiólogo del Ministerio de Salud.
Zapata recomienda a la población no consumir alimentos de dudosa procedencia, para evitar enfermedades gastrointestinales, así como el cisticerco, cuyo parásito proviene de la carne de cerdo y que puede alojarse en distintas parte del cuerpo humano, incluido el cerebro.
Para muchos pobladores, ver grandes cantidades de cerdos y vacas alimentándose de desechos en el vertedero es algo normal; sin embargo, hay quienes consideran que es una irresponsabilidad de los dueños, porque la carne y leche de estos llegan a muchos hogares jalapanecos.
Más ventas
Según algunos pobladores, en los últimos días se han incrementado las ventas informales de productos de carne de cerdo, y aunque en la mayoría de casos la carne proviene de una granja cercana, no descartan que algunos comerciantes prefieran los cerdos que se encuentran en las calles, porque les resulta más económico, por lo que hacen un llamado a las autoridades para que le pongan atención a esa problemática.
Las autoridades de Salud y del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) reconocen que en el basurero hay un problema con animales, pero aseguran que sus controles solo se enfocan en granjas y carnicerías.
Méndez señaló que para mitigar el problema se capacita a propietarios de animales para que sepan cuáles son las formas y los alimentos adecuados para cada especie, y así evitar que los vecinos se alimenten con carne contaminada.