Estas tres personas nunca se conocieron, pero ahora comparten un espacio en un mural que fue pintado en la vía 7 y ruta 4, zona 4 capitalina, por artistas invitados del movimiento Jóvenes contra la Violencia (JCV), que impulsan la campaña
Instinto de Vida, con la que buscan reducir a la mitad el número de homicidios en la región y salvar 23 mil vidas en el país, en los próximos 10 años, —7% al año—.
Wálter Corzo, coordinador de la campaña, explicó que Guatemala es uno los siete países más violentos de la región, y ese flagelo se ha tomado tan normal que no se ejecutan acciones para evitarlo.
“Se tiene la necesidad de desnaturalizar culturalmente la muerte de personas. El objetivo es revertir este proceso de violencia en la sociedad y cómo dejamos de ser indiferentes, para recuperar el valor de la vida”, enfatizó Corzo.
La campaña, que será lanzada hoy en el país —anteriormente en Brasil, Honduras, México y Colombia—, involucrará la participación ciudadana y la promoción de políticas públicas. En El Salvador está programada para el próximo mes, mientras en Venezuela ha sido aplazada por la situación política que se vive.
“Hay experiencias en otros países que se pueden hacer. Partimos de un mensaje claro: la violencia no es normal, y al ser indiferentes se degrada el tejido social. Nada justifica un homicidio, y debemos trabajar en unidad ante la coyuntura conflictiva”, explicó el líder juvenil.
Jóvenes contra la Violencia hace un llamado a las personas para que se unan y no se pierdan más vidas de niños, jóvenes y mujeres.
Según el movimiento, del 2009 a la fecha la tasa de homicidios se ha reducido 45 por ciento; eso quiere decir que se han salvado 13 mil personas.
“Son 13 mil personas, madres, esposas, niños, que no pierden el sustento de su hogar, que tienen la oportunidad de realizar sus sueños y es así como queremos hacer el llamado de la movilización ciudadana, involucrar a todos los sectores a que se sumen y a las autoridades responsables de proponer las soluciones a este problema”, agregó Corzo.
La primera fase de la campaña será de dos años, que incluye acciones para promover la participación ciudadana, trabajar con autoridades y varios sectores para que propongan soluciones.
Para el movimiento existen dos Guatemalas, una en paz, en la que se respeta la vida, y la otra en la que es normal morir.
Fase inicial
Durante el Festival Bonito Mi Barrio, que se realizó el fin de semana pasado en la zona 4, JCV plasmó en una pared los rostros de Ashley, Saulo y Roberto, para transmitir que detrás de una vida truncada por la violencia hay una historia.
Según los jóvenes del movimiento, estas tres personas representan tres diferentes grupos. Por lo tanto, tomaron los espacios públicos como parte inicial de la campaña. A esa actividad asistieron familiares de las víctimas, que son el rostro de las cifras que enlutan al país.
Los jóvenes buscan recuperar las costumbres y el valor de respetar la vida, que ya combinados movilizarán a la ciudadanía para que las autoridades ejecuten acciones lo más pronto posible.
Más de seis organizaciones de la Red por la Vida construyen esos mensajes con valor colectivo.
- Videos de testimonios de familiares que han perdido a sus seres queridos y que llaman a la paz