Añadieron que no están de acuerdo con la disposición, por lo que decidieron irse a protestar frente al edificio de Gobernación y apoyar al maestro Óscar Ramírez, quien permanece en huelga de hambre en el lugar, para exigir la renuncia del mandatario, quien de acuerdo con investigaciones de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala y el Ministerio Público, estaría implicado en la red de defraudación denominada La Línea.
La protesta también es apoyada por un grupo de estudiantes del Centro Universitario de Jutiapa de la Universidad de San Carlos de Guatemala, quienes con pancartas exigen se cumplan sus demandas.
En medio de una creciente presión para que renuncie, el presidente de la República, Otto Pérez Molina, aseguró que se mantendrá en el poder y lanzó una dura crítica a lo que llamó el intervencionismo de la comunidad internacional y la corrupción en el sector privado.
En los 5.27 minutos que duró el mensaje, Pérez Molina negó liderar la estructura de defraudación tributaria denominada La Línea. Aseguró también que no recibió dinero proveniente de los impuestos, acusación presentada el viernes recién pasado por el Ministerio Público y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig).
El discurso del mandatario fue polarizante y confrontativo. De hecho, su principal blanco fueron los empresarios y la comunidad internacional.
Aunque pide perdón al pueblo por la corrupción en su gobierno y los funcionarios que él nombró, termina solidarizándose con la clase política aspirante a asumir el poder, la mayoría rechazados por los guatemaltecos en las protestas ciudadanas.
“No hay una línea, son dos y hasta ahora ha aparecido la que recibe, pero no la que paga, sin duda enraizada en el sector empresarial”, dijo Pérez respecto de que hasta ahora solo están capturados funcionarios y supuestos operadores de la red ilegal.
En cuanto a la comunidad internacional, expresó: “No es aceptable que en Guatemala se pretenda instalar una estrategia intervencionista que tiene como objetivo dictarnos qué y no hacer, y quebrantar la democracia”.
El día en el que Otto Pérez Molina puso la mano en el fuego por #RoxanaBaldetti en entrevista con @jorgeramosnews > http://t.co/FBMNIq0o3y
— Univision Noticias (@UniNoticias) August 21, 2015
Terminó su mensaje diciendo: “Asumiré mi responsabilidad y aceptaré la ley, pero si algo positivo tenemos es que Guatemala cambió y la ley es para todos por igual”.
