ELEGIMOS PARA USTED
Los trabajos de remodelación concluyeron en septiembre de 2019; sin embargo, a la fecha el inmueble permanece cerrado. Los expendedores están preocupados porque desconocen la forma cómo se lleva a cabo la matanza de las reses que llega a los mercados.
El pasado 11 de marzo, la Asociación de Destazadores y el Concejo de Mazatenango visitaron el matadero para conocer los trabajos que se efectuaron. Los destazadores solicitaron la instalación de una segunda caldera en el área de los porcinos, bajar la altura de mesas para el faenado y adquirir dos mecanismos más para mover las reses muertas, se acordó un plazo de un mes para reiniciar labores, pero las modificaciones no se efectuaron.
Mabelia Alcántara, secretaria de la asociación de los expendedores, se mostró preocupada por la falta de compromiso por parte de la comuna.
Alcántara indicó que desconocen las medidas sanitarias del faenado y el lugar donde se lleva a cabo actualmente, lo cual pone en riesgo la salud de quienes consumen la carne.
Se informó que varios destazadores improvisaron rastros los patios de viviendas lo cual agrava la situación sanitaria provocada por la pandemia de coronavirus.
“No hay garantía donde exactamente y bajo qué condiciones están sacrificando a los marranos y las reses y qué clase de carne se está vendiendo al público, nadie de los compañeros va tener las condiciones más recomendadas para sacrificar ganado”, manifestó Alcántara.
El alcalde de Mazatenango, Manuel Delgado, que tenía el plazo de un mes para llevar a cabo las modificaciones que solicitaron los expendedores, argumentó que los trabajos se detuvieron por la pandemia.