Durante la lectura de la sentencia, este miércoles 21 de septiembre, el Tribunal no le dio valor probatorio al alegato de la defensa que señaló que en el anticipo de prueba, el testimonio de Orba Lili López -madre de Gabriela-, nunca estuvo presente un abogado de su defendido.
El Tribunal le dio valor probatorio al testimonio integro de la sobreviviente, la madre de la víctima.
Según el parte médico, al que también le dieron valor probatorio, las heridas que Gabriela sufrió le perforaron la carótida izquierda, un pulmón y perforaron el tórax; además, de las múltiples heridas en el cuello y tórax.
EN ESTE MOMENTO
La víctima fue apuñalada 15 veces en el abdomen, y tenía fracturada la nariz.
Mientras que su mamá, Orba López, tenía 35 heridas en el tórax posterior, espalda.
Análisis de las llamadas confirmaron que el 3 de febrero de 2017, la víctima llamó al acusado para ponerse de acuerdo para visitar la casa que sería dada en alquiler.
Pedro Morales, técnico del Ministerio Público, fue quien llevó a cabo el análisis y describió cómo funcionan las antenas al momento de recibir una llamada, el análisis confirma que sí hubo comunicación y el GPS lo sustenta, a este punto el tribunal también le dio valor probatorio.
La jueza, Vilma Rodríguez, en la parte resolutiva de la sentencia indicó que Emerson Marroquín fue hallado culpable del delito de femicidio por la muerte de Gabriela Barrios y del delito de femicidio en grado de tentativa en agravio de la madre de la víctima.
“Se hizo justicia”
“Puedo decir a mi hermana que se hizo justicia y que su muerte no fue en vano, eso es lo que podemos decir, nos quedamos todos agradecidos con Dios”, externó Nery Barrios, hermano de Gabriela.
Recordó que el proceso fue difícil por tantos recursos que quisieron interponer, por lo que hubo incertidumbre de saber qué iba a suceder.
“Como familia estábamos con esa duda, pero nunca dejando la confianza en Dios. Pedíamos más años -de condena-, sin embargo lo que deseamos es tener nuestra paz interior donde él -Marroquín- se sentenciara como lo que se sentenció hoy”, añadió.
Barrios indicó que su madre estará agradecida con Dios porque en Él han “confiado toda la vida”.
Expresó que su madre sabe que lo que pasó no fue fácil y que seguramente se siente satisfecha porque hubo justicia con la sentencia.
Érick Lancerio, exnovio de Gabriela, pidió que la recordaran como un símbolo de justicia, como una persona luchadora y responsable con la sociedad y con su familia.
Dijo que ahora prosigue buscar que la sentencia de Marroquín se cumpla fuera del área de Quetzaltenango, pero es algo que debe definir un tribunal.
“Yo se que Dios la tiene en sus manos y estoy contento por eso, porque ya no está sufriendo en este mundo, en este caso a mí me toca seguir con un nuevo futuro, nuevas ilusiones”, externó.
Silvia Tecún, abogada de Fundación Sobrevivientes, indicó que el solo hecho de la sentencia ya es reparación para la familia; sin embargo, solicitarán otros medios de reparación y de no repetición como garantías para velar por el bienestar de otras mujeres.
Anunció que solicitarán la reparación digna para la familia de las víctimas.
Mientras que el sentenciado Emerson Marroquín manifestó: “Dios se encarga de todo nada más”.
Cuando le preguntaron si apelarán la sentencia, respondió: “Es el primer tiempo nada más, falta mucho todavía por caminar”.
“No puedo decir nada, soy una persona educada, me han tratado como quieren, pero no hay problema, Dios es el que se encarga de todo”, manifestó.
El día del crimen
El 4 de febrero del 2017, Gabriela salió, junto a su mamá, de Xela a Cantel, Quetzaltenango, para conocer una vivienda que pretendían pedir en alquiler. Ese día ambas desaparecieron.
En la noche fue localizada con vida la madre y al día siguiente, en el río Samalá, fue hallado el cuerpo de Gaby.
La historia de terror que vivieron las victimas cuando acudieron a la granja San Vicente, kilómetro 221, Cantel, para conocer el inmueble que ofrecían en arrendamiento, según la investigación.
“Antes de irme le hablé a mi hija, la moví, la pellizqué, pero no respondió”, relató la madre de Barrios, sobreviviente del ataque, según la declaración que leyó el MP durante la audiencia de primera declaración de Marroquín el 23 de diciembre del 2017.
De acuerdo con la investigación del MP, las víctimas fueron atendidas por Marroquín, quien les indicó que dejaran el vehículo estacionado afuera de la vivienda, después les mostró el área verde y les dijo que no podía llevarlas al interior porque aún estaban los inquilinos, pero que pronto dejarían el lugar, lo que era un engaño.
La sobreviviente contó a las autoridades en esa ocasión que al llegar a un cuarto de bloc, donde se encontraba el manantial, Marroquín golpeó en el rostro a Barrios, la pateó y luego la hirió varias veces con un objeto compuesto por madera y un clavo.