QUETZALTENANGO.- La querella llegó a los tribunales de justicia como un caso penal por estafa; sin embargo, Félix Sontay, juez segundo de instancia penal de Quetzaltenango, resolvió que el problema debe resolverse primero en la vía administrativa entre Juárez y los representantes de la Junta Liquidadora de Fonapaz.
Durante la audiencia, el juez resaltó que no se ha agotado aún la instancia administrativa, ante lo cual no se procedió a continuar con el proceso, donde el Ministerio Público (MP) señala a Cordero como el responsable de una estafa en contra del empresario.
De acuerdo con la denuncia de Juárez, en noviembre del 2012 Cordero en compañía de Arturo Escobar, Pablo Sandoval y Clara Dávila, trabajadores de la institución, llegaron a su negocio a solicitar material que serviría para la reconstrucción de viviendas afectadas por el terremoto de ese año en San Marcos.
Los materiales que fueron entregados a la institución consistieron en láminas, cemento, parales rústicos, entre otros, cuyo costo suma Q197 mil 340.95, cuya compra fue avalada por Armando Paniagua, último director de Fonapaz.