Las autoridades recibieron una alerta de que los reclusos intentaban abrir un agujero en una pared para escapar, por lo que procedieron a efectuar la revisión.
José Martínez, jefe de la comisaria 41 de Quetzaltenango, dijo que cuando lo descubrieron únicamente habían retirado el repello.
“Se toparon con la piedra y esto impidió que pudieran hacer un agujero, nos percatamos de esto en el sector III del Preventivo”, refirió Martínez.
Según los agentes, el agujero se encontraban en un pasillo de la cárcel, donde está ubicada una iglesia para los reclusos. También señalaron que los daños fueron reparados.
Los agentes señalaron que la acción también se efectuó para corroborar que en el lugar los internos no escondieran armas, drogas o teléfonos celulares, los cuales usan para extorsionar.
“También estamos en búsqueda de las herramientas con las que los privados de libertad empezaron a abrir el agujero”, señaló uno de los investigadores.
Durante el operativo los agentes también contaron a los reclusos para verificar de que no faltara ninguno. En la inspección participaron 178 agentes de la comisaria de Quetzaltenango, además se contó con apoyo de cuatro sedes más del occidente.
De acuerdo con la información estadística de la PNC, en el preventivo están recluidos 277 hombres señalados de participar en ilícitos y esta fue la primera requisa del 2017.
