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Según relataron, el emprendimiento inició con Reyes y Castillo quienes intentaron incursionar en la venta de “frutas deshidratadas de un modo solar”, pero no lograban tener el producto que les convenciera para ofrecerlo al público.
En una reunión de amigos, Argueta se enteró de las intenciones de Castillo y Reyes, como tenía la idea de un negocio similar, entonces decidió contarles para que se asociaran, los emprendedores lo intentaron, pero en esa ocasión utilizaron un nuevo procedimiento para deshidratar las frutas.
“Todo empezó por tener una vida más saludable, queríamos tener algo diferente en Xela y llamar la atención del público, en primer lugar tuvimos la bendición de Dios y el asociarnos. Hacemos la deshidratación sacando la mayoría de agua del producto natural sin agregar colorantes, azúcar o conservantes, hasta que logramos que fuera un snacks”, relató Reyes.
Los jóvenes tienen la intención de promover el consumo de frutas en niños y adultos, consideran que esta es una forma factible de hacerlo. “La deshidratación es parte de la historia, los nómadas hacían eso, deshidrataban la carne para conservarla”, indicó.
Por ahora el producto lo ofrecen en envases de vidrio, además tienen un programa de reciclaje, los clientes pueden conservar los botes y al comprar nuevamente, entregarlos por un descuento de Q5.
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“Nuestro propósito no solo es el dinero, porque a veces solo importa la plata y al final eso se queda, lo que queremos es ayudar a la comunidad y dar un producto que sea saludable”, dijo Reyes.
Los lugares donde han tenido mayor aceptación son restaurantes quetzaltecos. “Estamos en tiendas de deportes y restaurantes, gracias a Dios la gente ha respondido bien, quedan satisfechos del producto”, dijo Castillo.
Las frutas deshidratadas que ofrecen son coco, piña, kiwi, fresa, durazno, pera, manzana, banano, rambután y naranja, todo depende de la “temporada”.
A futuro los creadores de la empresa desean introducir su producto en colegios y universidades, además de tener una alternativa para personas con diabetes, los vegetales deshidratados, por ahora producen estos en una minoría y solo por pedidos.
La materia prima de este emprendimiento, es la fruta, aseguraron que la compran en los mercados de Xela.
“No me importa levantarme desde las 4 de la mañana para trabajar, me gusta lo que hacemos con la fruta y que la gente lo acepte”, indicó Castillo.
“Por ahora somos los tres los que nos encargamos de la selección de la fruta, los cortes, el envasado, buscar los lugares de venta, ofrecer el producto, tenemos todos los procesos de sanidad, todo es desinfectado y estamos en el proceso para contar con todo lo necesario para poder ingresar a supermercados. En un futuro esperamos dar empleos”, aseguró Argueta.
Para los socios lo más difícil fue determinar el proceso de deshidratación con cada fruta. “Tienen diferentes niveles de liquido, diferentes temperaturas”, agregó.
Iniciaron con los restaurantes porque Reyes tenía experiencia en este mercado, donde trabajó por 15 años, inició en servicio al público hasta llegar a ser administrador.
En los restaurantes donde está a la venta Chipz, también han incorporado el producto en el menú.
“Lo hemos implementado en distintos platillos como entradas, ensaladas, para decorar postres y bebidas”, relató Carlos Solórzano, chef del Restaurante Nativos.
Los puntos de venta están ubicados en Tan Lechuga Yo, Restaurante Nativos del Pasaje Enríquez, Bicicasa, Enzo Anticafé, Pixan, Al Natur, entre otros.
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