La actividad, que fue organizada por un grupo de trabajadoras municipales, se desarrolló el viernes pasado, y el alcalde Luis Grijalva reconoció que sí hubo tal celebración, aunque afirmó que investigarán quién la autorizó, para tomar medidas.
“Hay varios tipos de medidas, podría ser una llamada de atención verbal o por escrito, por eso estamos haciendo las investigaciones. El hecho de que en años anteriores se hayan efectuado no quiere decir que ahora se vayan a permitir, pero tampoco podemos violar el debido proceso”, dijo Grijalva.
En las redes sociales circulan fotografías del grupo de trabajadoras que festejan a su compañera, algunas sentadas en las gradas alfombradas. Mientras que en otras se ve los obsequios colocados sobre el mobiliario del salón.
El salón guarda importantes muestras de la historia y arte de Xela, por ejemplo, una galería de pinturas al óleo de personajes históricos que han aportado el desarrollo de la ciudad.
Su arquitectura es similar a salones históricos como los que hay en Francia. Fue construido entre de 1884 a 1888, según el historiador Francisco Cajas.
En el salón, autoridades municipales han recibido visitas de embajadores, líderes sociales y presidentes del continente.
Críticas
Alejandra González, vecina de la zona 3 de Xela, calificó la acción de “falta de conciencia y amor por los edificios históricos”.
“Este salón fue creado para eventos de trascendencia y no para celebrar un baby shower, se deben tomar medidas correctivas, no solo una cartita”, expresó Jorge García, presidente de la Cámara de Comercio Filial Quetzaltenango.
Para el analista Ignacio Sánchez, las empleadas pudieron haber actuado sin malicia, pero su actitud es “un desgaste más para la administración del alcalde”.
Rony Álvarez, comunicador de la Comisión Ciudadana por la Transparencia y Probidad de Quetzaltenango, expresó: “Si ellas hubieran cumplido con todos los requisitos estaba bien, porque todos los habitantes tienen derecho de solicitar el salón, pero a muchas organizaciones no se les ha atendido, entonces se ve una preferencia. Hicieron uso de su cargo para utilizar el salón sin permiso”.
Responsabilidad
Las aludidas aceptaron el error y dijeron estar dispuesta a asumir las responsabilidades.
“Fuimos participes de la actividad, no lo negamos, en ningún momento quisimos perjudicar al alcalde o al Concejo, ellos ignoraban la situación, nunca quisimos perjudicar a la población y pedimos las disculpas correspondientes si en algún momento hay una sanción disciplinaria la aceptaremos”, dijo Rosana López, una de las participantes.