El ataque se registró a eso de las 18 horas cuando Vargas llegó como todas las tardes a solicitar sus alimentos, y según los propietarios del negocio, este leía un periódico cuando sujetos ingresaron y le dispararon.
Vargas Maldonada portaba un arma de fuego, pero no le dio tiempo a utilizarla para defenderse.
Varios clientes del negocio sufrieron crisis nerviosa, ya que varios de las balas perforaron las paredes.
Nancy Mendoza, socorrista de los Bomberos Municipales Departamentales, dijo que cuando llegaron la víctima estaba boca abajo, tenía varias heridas de bala y ya no tenía signos vitales.
Los vecinos indicaron que el ataque se registró a una cuadra de la subestación de la PNC, por lo que lamentan que en un pueblo pequeño ocurra ese tipo de hechos violentos.
Este es el segundo expolicía asesinado a balazos en los últimos días en esa zona, ya que el 2 de agosto último murió baleada Briseida Arévalo, 36, quien fue atacada en una clínica de la zona 2 de Colomba.