Gamarro Morales añadió que la denuncia fue interpuesta poco tiempo después de haber asumido el cargo y después se reunió con representantes de la Cicig y la fiscal general, Thelma Aldana, en noviembre anterior, y pidió apoyo para investigar y sancionar a quien resulte responsable.
“El faltante asciende a Q726 mil y fue un hallazgo de nuestro auditor interno poco después de que asumió la alcaldía, pues no cuadró el corte de caja que efectuamos. La verdad no pudimos precisar qué hicieron con ese dinero ni quién es el responsable”, afirmó Gamarro.
Además, se quejó de que la administración municipal 2008-2012 adquirió un crédito por Q21 millones, del cual a principios de este año aún se debían más de Q9 millones.
“Entre intereses y capital, las dos administraciones anteriores pagaron Q11 millones y a nosotros nos corresponde pagar los restantes nueve millones, lo que perjudica mi plan de trabajo, pues no podré ejecutar proyectos relevantes a causa de los descuentos que se han hecho para amortizar la deuda que debe estar cancelada en el 2020”, aseguró Gamarro.
Se intentó obtener la postura del exalcalde Diego Us López, pero no respondió las llamadas telefónicas.
En septiembre de 2015, el exfuncionario dijo, en relación al crédito de Q21 millones, que el monto correspondía a dos préstamos hechos por el Concejo de 2010 para emplearse en tres proyectos, pero estos nunca se ejecutaron porque hubo reprogramación de obras.
En aquella oportunidad, Us López, señaló que originalmente Q11 millones estaban destinados a un proyecto de agua entubada y los restantes Q10 millones para la construcción del segundo piso del mercado y del parque municipal.
No obstante, el dinero fue empleado para pavimentar la calle principal del área urbana, para el mejoramiento del servicio de agua entubada, alcantarillas, la construcción de una pista para carrera de caballos y la edificación del estadio municipal.
El último proyecto quedó abandonado con el 40 por ciento de avance y se sabe que se pagó más del 80 por ciento del costo total.