“En el presente caso, las agraviadas, en una reunión comunitaria en el caserío Portugués, fueron retenidas en contra de su voluntad por parte de los alcaldes auxiliares, quienes pretendían solucionar un conflicto por la propiedad de un terreno”, dijo el juez de sentencia Iván Morán Navas.
“Por el informe que psicólogas del Instituto Nacional de Ciencias Forenses presentaron durante las audiencias quedó acreditado que el abuso cometido por las autoridades comunitarias, produjeron en las víctimas un severo daño psicológico”, añadió Morán Navas.
Según la sentencia, los líderes comunitarios condenados a prisión lideraron el movimiento que también mantuvo como rehenes a los esposos y a los hijos de las agraviadas, al extremo que uno de los menores estuvo a punto de ser ahorcado.
“Los acusados recibieron cinco años de prisión cada uno por cada mujer que fue violentada, lo que hace un total de 15 años de prisión inconmutables”, sentenció Morán Navas.
El juzgador indicó que esta es la segunda sentencia condenatoria en contra de líderes comunitarios, pues en abril último también fue sentenciado a 21 años de prisión inconmutables un alcalde comunitario de la aldea La Parroquia Lancetillo, Uspantán, por el delito de violación sexual.