“Los grupos de delincuentes tienen de rodillas a Champerico y las víctimas de extorsión no denuncian por temor a que los maten, porque no hay seguridad, y los crímenes han sido en horas hábiles”, expresó Maldonado.
La comerciante Mirza Blanco comentó que las cuotas que exigen los delincuentes oscilan entre Q500 y Q700 semanales, por lo que muchos propietarios de negocios han decidido cerrar sus locales e ir a otro lugar para evitar ser atacados.
“Se presume que hay fuga de información. Se han visto casos en los que las personas han denunciado ilícitos y a los pocos minutos los delincuentes los llaman para amenazarlos”, expresó Blanco.
Teresa Méndez, otra comerciante, expresó que los agentes de la PNC destacados en Champerico no son suficientes, y que si la situación de inseguridad sigue como hasta hora ya no podrán comprar artículos de uso diario, porque muchos comercios cerrarán.
Pocos agentes
Byron Loayes, comisario de la PNC en Retalhuleu, dijo que por razones que se desconocen las personas que son víctimas de ese tipo de hechos no denuncian. Añadió que hay pocos agentes disponibles en Champerico y solo cuentan con tres autopatrullas, por lo que es difícil garantizar seguridad a toda la población.
“Hay 39 agentes asignados en ese municipio, y algunos están suspendidos por problemas de salud y otros de descanso. Recientemente recibimos apoyo de del Ejército, lo que ha sido fundamental para mantener controlada la situación”, expresó Loayes.
No hay denuncias
El comisario agregó que no han recibido denuncias de extorsiones ni en Champerico ni en la cabecera, debido a que las personas posiblemente las presentan en el Ministerio Publico, lo que ha causado que varias personas sean aprehendidas sindicadas por ese delito.
El gobernador Ángel Martínez indicó que se ha gestionado para que efectivos del Ejército acompañen en los patrullajes de los agentes de la PNC en el citado municipio, con el objetivo de reducir los índices de delincuencia.