Las pinturas fueron entregadas por Mario García, Alfredo García Gil y Fernando Ixcamey, quienes en febrero del 2014, iniciaron las gestiones ante las autoridades de la iglesia. Las pinturas permanecerán en el templo.
Monseñor José Ramiro Pellecer, vicario arzobispal, mostro gratitud por el gesto de los pintores. “Agradecemos a los artistas por darnos su trabajo, mientras esperamos que nos devuelvan las pinturas que se llevaron los ladrones”, expuso el religioso.
El robo
La sustracción de las seis pinturas de Tomás Merlo ocurrió el 5 de febrero del 2014, cuando delincuentes aprovecharon que el sacristán cerraba la puerta del templo, y lo redujeron. Tras atarlo de pies y manos, se llevaron obras del siglo XVIII.
Los nombres de las pinturas robadas son: La Coronación de Espinas, Jesús ante Caifás y la Negación de Pedro; La prisión de Cristo y la Curación de Malco, La Piedad, La Flagelación y La Oración en el Huerto.
El Ministerio de Gobernación ofreció Q100 mil de recompensa a quien de información sobre estas obras.