Consuelo Gómez, originaria de la aldea San Francisco Soche, San Pedro Sacatepéquez, se dedica a hacer cruces de madera, con cheche y flores.
Explicó que ésta es una herencia de sus ancestros, y la actividad la realiza desde hace varios años para ganar algo de dinero para aportar a la economía doméstica y al sustento de su familia.
Las cruces son vendidas a Q4 cada una y las personas las adquieren para colocarlas como un ritual en el interior de sus viviendas, indicó.
Juana López, del mismo municipio, comentó que ella también elabora cruces, y las hace con mucha devoción, no solo para ganarse la vida, sino para que la tradición no se pierda.
Las cruces son utilizadas por albañiles para colocarlas en las construcciones donde trabajan, las adornan y luego celebran su día de formas muy diversas.
Carlos Barrios Maldonado, otro poblador, opina que ésta tradición viene de hace muchos años, y se realiza para darle la bienvenida a las lluvias.
Entre tanto, en Comitancillo, se celebra su fiesta titular del 1 al 4 de mayo, en conmemoración del hallazgo de la Santa Cruz en Jerusalén.
Su clima es frío, cuenta con 46 mil 371 habitantes, según el último censo poblacional, predomina el idioma mam, y está ubicado a 280 kilómetros de la capital del país y a 28 de la ciudad de San Marcos.