Añadió que las víctimas tienen entre 9 y 16 años, cuyos hechos fueron cometidos por personas que ya fueron identificadas y entre quienes se encuentran integrantes del núcleo familiar de las ofendidas, quienes fueron atendidas en la clínica del Inacif.
Jeannette Ochoa López, auxiliar de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), dijo: “Es lamentable que estén sucediendo estos abusos en contra de las menores de edad, en su mayoría estudiantes”.
Resaltó que es necesario que los padres de familia hagan las denuncias cuando sospechen que sus hijas son víctimas de abusos, para que no se siga ofendiendo a las féminas con estos hechos reprochables.
Olga López Coronado, delegada regional de la Defensoría de la Mujer Indígena, explicó: “Lo que ocurre es que ya no se practican los valores morales, éticos y culturales en la sociedad”.
Afirmó que es necesario que las autoridades judiciales cumplan la función para la que fueron nombradas; o sea, perseguir y esclarecer los abusos sexuales para penalizar a los responsables.
Casos recientes
La semana última, un padre de familia denunció en la Defensoría de la Mujer Indígena que su hija, de 15 años, había sido violada en la aldea San Rafael, San Antonio Sacatepéquez.
Mientras, varios vecinos de la zona 3 de la cabecera comunicaron a la Defensoría que recientemente, en la madrugada, en una calle céntrica escucharon que una mujer gritaba: “¡Auxilio, me están violando!”, por lo que solicitaron más seguridad en el sector a las autoridades correspondientes.
