Todo comenzó la noche del 16 de octubre cuando un grupo de al menos 10 soldados, que se desplazaban en un camión del Ejército de Guatemala, ingresaron a esa comunidad.
El camión que transportaba a los soldados ingresó a la aldea alrededor de las 20 horas y empezó a recorrer las calles de la localidad, pero cuando los pobladores se dieron cuenta, se organizaron para detener el vehículo.
Los vecinos mencionaron que existían rumores de que el 17 de octubre habría operativos de las fuerzas de seguridad contra las manifestaciones y bloqueos que se han mantenido desde el pasado 2 de octubre, y por eso retuvieron a los soldados.
Los soldados explicaron a los pobladores que ellos regresaban de Huehuetenango, pasaron la cumbre de Alaska en búsqueda de rutas que les permitieran evadir los bloqueos y llegar a San Francisco El Alto, pero terminaron en la mencionada comunidad.
El vocero del Ejército, Rubén Téllez, confirmó que los soldados efectuaban unas diligencias y que se perdieron tratando de evitar los bloqueos y aseguró que todo se debía a “una confusión”.
Firman acta
Durante horas los pobladores mantuvieron retenidos a los soldados, unos de los cuales fueron identificados como el subteniente Jimmy Fuentes Carreto, y los soldados, Alfredo Marroquín, Carlos Alejandro Pérez Alvizures, Emerson Morales, Fredy Parán, Nelson Anibal Chen, Eugenio Chavic Chocoj y el piloto del camión Juan Castro.
Estas personas iban acompañadas de tres civiles, los cuales no fueron identificados.
Delegados de la Procuraduría de Derechos Humanos y representantes de los 48 Cantones de Totonicapán llegaron al lugar a mediar y tratar de establecer qué había ocurrido.
A eso de las 23 horas, las autoridades indígenas suscribieron un acta en la cual hicieron constar lo que había ocurrido y las acciones que tomarían.
que mencionaron que los soldados habían ingresado a la comunidad y eso había puesto en alerta a los pobladores y por eso habían sido retenidos.
En el acta exigen al presidente de la República- Alejandro Giammattei-; y a los ministerios de Gobernación y de la Defensa de se abstuvieran de enviar este tipo de contingentes militares porque constituían una provocación e intimidación hacia la población.
Hicieron responsables al Gobierno y a la fiscal general Consuelo Porras de todo lo acontecido en esa comunidad, así como la situación que se vive en ese municipio, departamento y en el país.
Escoltan a soldados
Reiteraron que las protestas que realizan son pacíficas y en aras de eso se acordó liberar a los soldados retenidos y escoltar al camión con sus integrantes hasta el destacamento militar de Santa Catarina Ixtahuacán, Sololá, para resguardar su integridad física.
Explicaron que con este acto demuestran que son un pueblo culto y pacífico, contrario a lo que se ha querido hacer ver por parte del Gobierno, solo por exigir sus derechos.
Rubén Téllez, vocero del Ejército, confirmó que a eso de la medianoche, el personal militar ingresó al destacamento de Santa Catarina Ixtahuacán.
Agradeció a las autoridades locales el respeto a la integridad y a la vida de los soldados, y señaló que estos están al servicio de los guatemaltecos.
