“No hijo, su cuerpo mataron, pero su alma vivirá para siempre”, fueron las palabras que Ludi Ramírez, madre de la víctima, le decía a su nieto de 4 años que mostraba su tristeza por lo sucedido.
La abuela del menor resaltó que su hijo era el que trabajaba para el sustento de la familia; “no sé qué hacer, no tengo dinero ni para la caja, espero que alguien me ayude”, manifestó la angustiada madre.
Peritos del Ministerio Público no localizaron ninguna evidencia en la escena del crimen; en tanto, se informó que el crimen sucedió en un sector donde no cuenta con servicio de energía eléctrica, lo que es aprovechado por delincuentes para cometer crímenes.