El colectivo prestaba servicio entre el área urbana de la cabecera y al momento del ataque no transportaba pasajeros.
“No entiendo por qué le pasó esto a mi esposo, él era una persona dedicada a su trabajo y muy respetuoso, solo a la gente buena le pasan estas cosas”, manifestó Delmi Ramírez, esposa de la víctima.
Vecinos se extrañaron por el ataque, ya que indicaron que no escucharon disparos.