Los Warriors se apoderaron así de una ventaja en el tope -al mejor de siete encuentros- que continuará este martes con el Juego 2 en esta misma sede de Oakland.
El ganador se enfrentará en la gran final de la NBA con el vencedor de la final de la Conferencia Este entre los campeones defensores Cleveland Cavaliers y los Boston Celtics o los Washington Wizards, ya que los bostonianos y capitalinos están todavía empatados 3-3 en su serie del Este.
San Antonio ganó 61 partidos en la etapa regular mientras que los Golden State Warriors, campeones defensores del Oeste, terminaron con 67 triunfos.
El tope de Warriors y Spurs es el clásico encuentro entre el ataque más productivo de los primeros y la excelente defensa de los segundos.
Por el conjunto texano los mejores fueron LaMarcus Aldridge, con 28 puntos, y Kawhi Leonard, con 26 tantos.
Los Spurs habían cerrado el primer cuarto en una ofensiva de 12-2 para conducir las acciones y poner distancia con marcador de 30-16, después comenzaron el segundo cuarto con un arranque de 14-3 para aumentar la diferencia.
San Antonio terminó arriba en el marcador en el descanso intermedio con amplia ventaja de 62-42.
Gran recuperación
Los Warriors respondieron en el tercero con un ataque de 18 tantos, para acercarse 78-73, que dejó con una clavada el astro Kevin Durant.
Los Warriors efectivizaron sólo para un 34% en tiros de campo en la primera mitad y cometieron 10 pérdidas de balones en los dos primeros parciales, pero supieron sacar al final su casta de guerreros para imponerse dramáticamente.
Por San Antonio el español Pau Gasol anotó sólo cinco puntos, mientras que el argentino Manu Ginóbili terminó con 17 saliendo de la banca.