Rotundo con el 'drive', Del Potro logró pronto una rotura sobre Murray, que se la devolvió después de que el argentino tuviera bola de set.
¿Lesionado?
Pero el argentino multiplicaba los gestos negativos. Se tocaba el aductor, negaba con la cabeza, gritaba o amagaba con golpear el suelo con la raqueta. Un posible abandono planeaba en la central de Roland Garros.
Finalmente el larguísimo primer set -casi una hora y media- se definió en el 'tie break' para Murray. Del Potro se lamentó de las ocasiones perdidas apoyando la cabeza en la red durante unos instantes.
El escocés aprovechó el bajón emocional de su rival para lograr una rotura al inico de la segunda manga. Del Potro se fue recuperando, pero una vez más Murray estuvo mejor en el desenlace.
La tercera manga tuvo menos historia. Murray siguió su línea de regularidad y a Del Potro no le llegaba el físico para poder competir. Cedió en dos horas y 53 minutos.