El rey Felipe resaltó los valores de la “lealtad” y el “compañerismo” que representa la selección masculina de rugby de Nueva Zelanda, acreedores del Premio Princesa de Asturias de los Deportes.
Tras hacerles entrega del galardón en la ceremonia celebrada en el Teatro Campoamor de Oviedo, don Felipe ha incidido en que para ellos, “el trabajo en equipo y la colaboración, son norma”.
“Tienen una pasión común, el rugby; el rugby jugado de forma modélica, no solo para ganar, sino también para practicar en el campo las mejores virtudes del deportista completo: juego limpio, camaradería, solidaridad, educación, respeto”, señaló el rey al referirse a los últimos galardonados con el Premio Princesa de Asturias de los Deportes.
Los All Blacks son, además, según el monarca, un “ejemplo de diversidad, de fusión de culturas y tradiciones” y un “impagable ejemplo, sobre todo para los niños y jóvenes del mundo”, que deben aprender a practicar cualquier deporte con un “espíritu solidario, inclusivo y fraternal”.
“Hoy destacamos esa actitud ejemplar y se la agradecemos con una admiración muy especial”, dijo don Felipe en su discurso, con el que cerró la ceremonia de entrega de los premios Princesa de Asturias 2017.
Según don Felipe, los premiados con estos galardones saben bien qué significa trabajar en equipo, “sumando fuerzas y talento, buscando el éxito común, compartiendo conocimiento, entusiasmo y esfuerzo”.
Previamente, y nada más recibir el galardón de manos del Príncipe, y sin que estuviese previsto en el guión de la ceremonia, cuatro de los jugadores de la selección neozelandesa de rugby interpretaron en el escenario la haka, y arrancaron los aplausos de los presentes.