Se espera que esta tarde, los directivos del equipo, antes que del comienzo del partido contra los Trail Blazers de Portland, en el Toyota Center de Houston, ofrezcan una rueda de prensa para dar a conocer de manera oficial el despido de McHale y la designación de Bickerstaff como interino.
Los Rockets tienen marca perdedora de 4-7 después de que el pasado lunes cayeron ante los Celtics de Boston por 95-111 en el Toyota Center, de Houston.
La derrota fue la cuarta consecutiva que sufrió el equipo después de haber tenido un inicio con otras tres al hilo y siguieron con racha de cuatro triunfos en fila.
McHale, de 57 años, se encontraba en su quinta temporada con el equipo y era la primera de la extensión de tres que le habían hecho el pasado diciembre con un salario de 12 millones de dólares.
Después de concluir el partido ante los Celtics, el propio McHale reconoció que los jugadores habían bajado la cabeza y que las cosas no marchaban bien.
“Las cosas no marchan en el camino que queremos y la realidad es que no estamos jugando juntos un buen baloncesto”, destacó McHale, que llegó a los Rockets antes de la temporada del 2011-12.
Durante las cuatro temporadas que estuvo al frente del equipo McHale logró marca de 193-130, logró disputar tres veces la fase final y la pasada liga disputó las finales de la Conferencia Oeste que perdieron ante los Warriors de Golden State, actuales campeones de la NBA.