El jugador de 27 años, que actualmente ocupa la tercera posición del ranking, recibió varias críticas por haber aceptado la invitación de Trump de jugar en un campo en Florida y dijo haber sido tildado de “fascista” por desconocidos en las redes sociales.
“Ser llamado fascista o bigote por algunas personas simplemente por haber pasado tiempo en compañía de otra persona es ridículo”, consideró McIlroy.
“Espero que esto clarifique en algún punto mi decisión de aceptar la invitación que me fue extendida”, añadió el golfista, que regresará la próxima semana a la actividad precisamente en México, uno de los países más afectados por las políticas de Trump.
“Gracias a todos por su apoyo y los espero en mi regreso la semana próxima en México”, concluyó su mensaje el jugador norirlandés.
— Rory McIlroy (@McIlroyRory) February 24, 2017