El veterano golfista californiano, con más de una veintena de participaciones y ganador del Abierto Británico en 2013 en Muirfield, ha terminado una jornada inusualmente soleada en Escocia con ocho golpes bajo el par, a tres golpes de sus inmediatos perseguidores, el estadounidense Patrick Reed (-5) y el alemán Martin Kaymer (-5).
“Esto no es normal. Durante toda la semana pasada ha hecho frío, viento y lluvia”, dijo Reed, al que el sol le ha ayudado a jugar con más agresividad sin temor a los vientos escoceses que azotarán el recorrido de Royal Troon durante las siguientes jornadas.
Los primeros puestos de la clasificación están acaparados por golfistas estadounidenses, como Justin Thomas (-4), Steve Stricker (-4), Billy Horschel (-4), Tony Finau (-4), Zack Johnson (-4), ganador de la edición de 2015 en Saint Andrews, y Keegan Bradley.
De hecho, los golfistas de Estados Unidos se ha llevado las seis últimas jarras de clarete del Open Británico que se han disputado en Royal Troon. Los dos últimos ganadores fueron Justin Leonard, en 1997, que ha acabado esta primera jornada de 2016 con un golpe bajo el par, y Todd Hamilton (+4), en 2004.
“Creo que entiendo un poco mejor como jugar el Open y estoy más equipado para manejar los elementos”, dijo el norirlandés Rory McIlroy, siempre favorito a revalidar su victoria de 2014 y ausente en 2015 por una lesión futbolística, que ha acabado una jornada desigual con dos golpes bajo par, a seis golpes del líder.
Phil Mickelson ha hecho cuatro birdies en los primeros cuatro hoyos y cuatro en los segundos, ha puesto la bola en la calle y en los greenes más del 80 por ciento de las veces. Unas estadísticas que serán muy difíciles de replicar en las siguientes jornadas.
“Solo he hecho dos birdies hoy. Bastante poco en un día como hoy en el que no hay viento y el campo se deja”, dijo el número uno del mundo, el australiano Jason Day, que ha acabado con dos golpes sobre el par.
“He pasado mucho tiempo aprendiendo cómo jugar en el viento escocés y lo disfruto realmente”, dijo Mickelson acerca de las difíciles condiciones que se anuncian para el viernes.