La concentración, disciplina y madurez son aspectos fundamentales que le han permitido salir de esta etapa difícil de su vida. Zamora asegura que espera poder disfrutar la competencia, que se realizará del 22 al 30 de junio próximos.
“La lesión me ayudó a madurar en todo sentido y el factor de la nutrición fue uno de ellos, pues logré mantener mi peso y ahora llevo una vida más saludable, y eso se refleja en el tatami”, explicó.
Sobre sus posibles rivales en el Mundial, aseguró que será una competencia muy fuerte, con deportistas de gran experiencia, y que ve a todas con las mismas posibilidades.
Trabajo táctico
Los últimos entrenamientos en Guatemala fueron tácticos, para afinar detalles. Ely se siente fuerte para conseguir un buen resultado, pero sobre todo está satisfecha con dar todo su esfuerzo en cada práctica. “Doy el 110 por ciento en cada entrenamiento. No me gusta quedarme con mal sabor de boca”, dice.
Zamora sufrió en noviembre del 2015 la ruptura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Un mes después fue sometida a una cirugía y su recuperación fue lenta.
En agosto del 2016 pudo regresar a los entrenamientos y en enero de este año retomó el ritmo normal, con doble turno: en la mañana gimnasio y en la tarde, taekuondo.
En el Mundial de Corea del Sur también participarán Andrés Zelaya y Francisco Palacios. Los atletas viajaron el pasado lunes, bajo la dirección del entrenador Federico Rosal.