Fue su abuelo José Toledo —q.e.p.d.— el responsable de que pisara por primera vez un campo de golf. El Club Hacienda Nueva, en San José Pinula, enamoró a José Manuel y después de su primera experiencia, no lo quiso dejar jamás.
“A mi abuelo le gustaban mucho las reuniones familiares. Los fines de semana nos íbamos a Amatitlán, pero con el tiempo dejamos de ir. Justo en ese momento nos regaló una membresía a sus hijos y a sus nietos en Hacienda Nueva”, recuerda el golfista.
Su primer entrenador fue el argentino Jorge Nayen quien lo ha visto crecer como persona y profesional. Nayen asegura que desde sus primeras prácticas se le notaba “la chispa” de que era “alguien diferente”.
En 1996 ganó su primera Copa en el Campeonato Nacional de Golf, en la categoría infantil. “Sabía que era bueno y eso me picó”, asegura Toledo.
Jeniffer Gómez
Fue entonces cuando sus tardes, después del colegio, fueron dedicadas a practicar golf. “Nos unimos mucho con mi mamá porque pasábamos bastante tiempo juntos”, recuerda.
Del colegio al club eran 25 minutos en el automóvil, en los que aprovechaba para conversar con su madre. “Mi mamá me llevaba el almuerzo e iba en el camino comiendo”.
José Toledo iba todas las tardes al club a entrenarse y así llegó su primer viaje a los 11 años a un Torneo Centroaméricano. No tardó en volverse costumbre el salir del país y faltar más a sus prácticas de futbol.
- •Nació el 12 de mayo de 1986, en la capital.
- Primer lugar en el Essential Costa Rica Classic, en mayo del 2017.
- •Segundo lugar en el Quito Open, en junio del 2017.
- • Primer lugar en el Abierto de Hacienda Nueva, en
- marzo del 2016.
- • Segundo lugar en el Mayan Open, en abril del 2016 y primero en el 2015.
- • Primer lugar en el México Golf Tour-Campeche,
- en octubre del 2015.
Durante su adolescencia José no pensaba en convertirse en golfista profesional, por mucho que disfrutara del deporte. Por el contrario, su sueño era obtener una beca en alguna universidad estadounidense para prepararse académicamente; sin embargo, la pasión se incrementaba cada vez más.
Faltó a su graduación del colegio Valle Verde por estar en un torneo en Puerto Rico en el 2004. “Preferí ir al torneo que estar en el acto. Son sacrificios que se han ido pagando poquito a poco”, explica.
Finalmente consiguió una beca en la Universidad de Nueva Orleans para estudiar Administración de Empresas y Economía, y desde el día uno se involucró en el golf. Allí fue cuando su nivel comenzó realmente a subir, por el roce con otros jugadores.
“Me empezaron a nombrar como el jugador del Estado, de la semana, del mes. En el primer año gané siete torneos locales y estaba entre los mejores 20 de Estados Unidos. Ahí comencé a analizar en volverme profesional”, revela.
Entre amigos
En mayo del 2009 se graduó con honores como el mejor deportista. Después regresó a Guatemala a buscar patrocinadores. “No encontré apoyo y le hablé a Jorge Nayen e hicimos un torneo para recaudar fondos y con eso arranqué”.
“Pablito Acuña tenía un par de años de profesional y estaba viviendo en Houston y me dijo que me fuera a vivir con él y así lo hice. Me tocó empezar así y hasta hoy ahí sigo y por eso le agradezco mucho porque si no fuera por él yo no hubiera conocido a mis entrenadores”, reconoce Toledo.
Acuña recuerda que en una ocasión, en Houston, ambos querían dar una muestra de disciplina y decidieron ir a entrenarse a pesar de las difíciles condiciones climáticas.
“Estábamos bajo cero, había mucho frío y llovía. Llegamos motivados al campo y aguantamos solo 15 minutos, después de eso nos vimos las caras y nos preguntamos qué estábamos haciendo ahí”, cuenta, mientras sonríe. “Después nos dimos cuenta que al menos lo intentamos y eso valió la pena”.
La aventura de José Manuel como profesional comenzó en el 2009 en el City Bank Lubbok Open. Ocupó el puesto 21 de 100 jugadores. Las alegrías llegaron para el negrito, pero tuvo que esperar ocho años para poder festejar a lo grande.
En mayo ganó un parada del PGA Tour Latinoamérica, en Costa Rica, y posteriormente quedó segundo en Ecuador. Estos logros son la gasolina que necesita para buscar la clasificación al web.com Tour y posteriormente pensar en el PGA.
Para él, “ganar marca una diferencia”. Y ahora sus sueños se han incrementado. El PGA, en el que jugó en algún momento su ídolo Tiger Woods, es su próxima meta a conquistar.