De esta manera Arredondo, denominado por el Rally como Piloto Leyenda, concretó el sueño de volver al desierto de la mano de la competencia que ha sido parte de su vida durante 14 años. De estas participaciones son nueve las que ha finalizado con éxito, y en cinco le ha tocado enfrentar la amargura del abandono por fuertes caídas o fallas mecánicas.
Después de competir en 14 etapas, más un prólogo y un día de descanso, Francisco finalizó en el puesto 58 de la general de motocicletas con un tiempo de 61:43.56 horas, y logró uno de los mejores lugares en sus participaciones en el Dakar: fue 36 en su división, Rally 2, además de ser el 5to. mejor latinoamericano.
El Dakar es así: un sueño, luego una pesadilla y nuevamente un sueño. Francisco inició su aventura en esta competencia en el 2004, cuando la carrera partía de Europa y se trasladaba hacia el África negra, luego, por razones de terrorismo la caravana se mudó a Suramérica por algunos años, para realizar sus últimas ediciones en Asia, concretamente en Arabia Saudita, donde el guatemalteco este domingo saboreó la gloria.
“Estoy muy cansado, pero estoy satisfecho y muy feliz por los resultados. Fue un gran Dakar, un auténtico trabajo en equipo. Agradezco a todos por el apoyo, por estar pendiente de mí, a mi familia, amigos, a la gente que me escribía en las redes sociales, y a los medios de comunicación que estuvieron al tanto. Esta es un felicidad inmensa, ya que nuevamente volvió a sonar el nombre de Guatemala en el Dakar”, comentó Arredondo.
La etapa 14 del Dakar 2023 constó de 417 kilómetros, de los cuales 136 fueron de especial cronometrada. La jornada presentó las dificultades habituales de esta competencia; sin embargo, los pilotos estaban ahí, a un paso de concretar el sueño de finalizar la carrera. Al pasar la meta los triunfadores de las diversas categorías se llenaron de gloria, y los corredores que completaron el Rally también se llenaron de júbilo al concretar sus metas personales. Este domingo no hubo perdedores, solo ganadores.
Este Dakar fue intratable y extremo, el cual dejó afuera desde las primeras etapas a grandes pilotos de talla mundial, favoritos al triunfo. No tuvo piedad de nadie; sin embargo, a pesar de estas adversidades el título de motocicletas se quedó en Latinoamérica, ya que el Argentino Kevin Benavides (Red Bull KTM Factory Racing) se llevó la victoria en el final más cerrado de la historia de la competencia.
En autos fue el príncipe catarí Nasser Al-Attiyah con su navegante Mathieu Baumel de Francia (Toyota Gazoo Racing), quienes se llevaron el triunfo; en Quads el fránces Alexandre Giroud (Yamaha Racing – SMX – Dragon) se impuso; mientras que Janus Van Kasteren y Marcel Snijders de Países Bajos, junto a Darek Rodewald de Polonia (Boss Machinery Team de Rooy Iveco) conquistaron el título.