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 Eclipsados por el clásico español

Isabel y Luis Pedro son dos de los muchos fanáticos del Barcelona y Real Madrid quienes el amor por sus equipos les cambió la vida.

Para Isa Mathieu y Luis Pedro González ser aficionados a sus equipos es un estilo de vida. (Foto Prensa Libre: Esbin García)

Para Isa Mathieu y Luis Pedro González ser aficionados a sus equipos es un estilo de vida. (Foto Prensa Libre: Esbin García)

Isa Matheu  conoce la intimidad del FC Barcelona de pies a cabeza porque es su primer amor.

Su habitación está adornada con objetos del Barcelona. Al abrir sus ojos  lo primero que ve es un póster del “mejor jugador del planta, Lionel Messi”, luego toma su celular y desde su cuenta de Twitter empieza a enterarse de las intimidades del equipo. Así es cada día para Isabel Matheu. 

Conoce cada detalle del plantel, su filosofía, valores, forma de juego y a qué jugador no debe alinear Luis Enrique.
Desde el sábado pasado,  Isabel  vive con ansiedad por el clásico. “Empecé desde el sábado a contar los minutos. Me tiemblan las manos y siento el corazón acelerado.  Es una sensación inexplicable”, afirma.  

La fanática  de 26 años vive al extremo su amor por el equipo catalán desde hace 7, aunque sigue al club desde los 13.
“Empecé a estudiar un poco más al Barcelona y ver de dónde vienen y a dónde va. Los personajes, la táctica, y fue así como el equipo se convirtió en mi primer amor”, señala. 

“Dos horas antes de cada partido  cuando anuncian la alineación ya no pueden ni hablarme, porque estoy enfocada en cómo van a jugar, a quiénes deberíamos de meter  y si está acertada la alineación, de Luis Enrique”, explica.
enamorada

A los 13 años Isabel sintió atracción por un  joven aficionado del Barsa. Para tener de qué hablar con él “empezó a ver juegos del club”. Con el correr de los días no volvió a ver al chico y ella quedó enamorada del equipo culé.

“Fue bien chistoso. A partir de ahí nació mi amor por el Barcelona. Después me enamoré de su  forma de jugar. No era solo de tirar el balón, sino que tenía una idea de juego”, recuerda. 

Isabel encontró una forma de vida. Sueña con ser entrenadora  y viajar al Camp Nou para observarlos jugar”. Para ello, cada fin de mes ahorra del sueldo que recibe por su trabajo de publicista.

“Cada vez que juega el Barsa, mi madre me dice que ojalá no gane para que me pase enojada todo el día”, comenta. Así de extremo es el amor de Isabel por el club Catalán.

Cristiano le cambió la vida

El 18 de marzo del 2010, después de varios intentos,  Luis Pedro  logró que CR7 lo siguiera en Twitter.

Una apuesta con sus mejores amigos le cambió  la vida a Luis Pedro González Peñalonzo, un guatemalteco que ha madrugado, ha llorado y explotado de felicidad por ser uno de los fieles aficionados al Real Madrid.

El futuro ingeniero en sistemas de 22 años tiene un encomiable pergamino como seguidor merengue,  que cualquier persona quisiera poseer, y no es para menos: el astro portugués del Madrid Cristiano Ronaldo, le sigue en la red social de Twitter.

El tres veces balón de oro   posee 48.5 millones de seguidores en Twitter y apenas sigue a 95, entre ellos a los futbolistas Sergio Ramos, James Rodríguez, Radamel Falcao y Kaká; a los artistas Rihanna, Justin Bieber, JLo y Enrique Iglesias.
En ese excelso listado aparece el nombre del guatemalteco Luis Pedro Peñalonzo, quien  afirma que gracias al follow de CR7 empezó a ser otra persona.

“Tengo más de 25 mil seguidores  y algunos de los patrocinadores de Cristiano han decidido  seguirme. Me siento un tanto famoso”, expresa emocionado, al momento que se acomodaba un sudadero azul del Real Madrid.

“Intercambié un chat con Cristiano por el partido contra el Wolfsburgo. Lo felicité y él me respondió muy cordial”, agrega mientras acomoda su colección de camisolas merengues, la mayoría autografiadas por su ídolo portugués —ha viajado en cuatro ocasiones a Madrid, por el equipo—.

Cuando su padre, Lewis González, seguidor del Atlético Madrid, comenzó a obsequiarle camisolas de los merengues, a los 5 años, Peñalonzo nunca dimensionó el amor que llegaría a sentir.

Para el seguidor madridista  no hay nada que lo emocione más  que cantar los goles del Real Madrid y celebrar sus triunfos. Eso sí, pasa los peores días cuando pierden.

“No  solo me conformo con  ver los partidos del Real. Me gusta estar enterado de todo lo que hace. Seguirlo es como una religión”, explica el supervisor de un call center que sueña con especializarse en el mundo del deporte y del mercadeo.

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