Fútbol Internacional

Así quedó la pierna de Cristiano Ronaldo tras una dura entrada en la derrota del Manchester United ante el Everton

El delantero portugués sufrió de una fuerte entrada en el tramo final del partido de Premier League entre Manchester United y Everton.

El delantero portugués sufrió una dura entrada en el segundo tiempo del partido entre el Everton y Manchester United. Foto Prensa Libre (AFP)

El delantero portugués sufrió una dura entrada en el segundo tiempo del partido entre el Everton y Manchester United. Foto Prensa Libre (AFP)

El Manchester United continúa en una dinámica negativa y sigue sin poder levantar cabeza. Recientemente eliminados de la UEFA Champions League a manos del Atlético de Madrid del Cholo Simeone, el conjunto dirigido por Ralf Rangnick volvió a caer, esta vez ante el Everton 1-0 por la Premier League.

Ya en el tiempo de descuento del compromiso, el lateral del Manchester United Alex Telles levantó un centro al área del Everton buscando la igualdad en el marcador. Pickford, portero del conjunto local rechazó la jugada de ataque y en el movimiento realizado se terminó llevando por delante al delantero portugués.

En la jugada inmediata, Ronaldo ya no hizo esfuerzo por ganar el balón ya que se le notaba con una molestia. Pasados unos segundos el juez central decretó el final del partido y Cristiano se bajó la media en donde era visible una herida.

La pierna izquierda del delantero mostraba dos cortes con sangrado cerca de la zona de la tibia. El Machester United no se pronunció sobre la herida ni si el delantero recibió algún tratamiento especial.

Un par de minutos después, cuando los jugadores del Manchester United se retiraban del campo, Ronaldo, visiblemente molesto,  protagonizó un incidente en donde tiró un teléfono a uno de los aficionados que les grababan en el camino a los vestuarios de Goodison Park, estadio del Everton.

Con el resultado 1-0, el United se queda séptimo, con 51 puntos, a tres de la Champions, pero con un partido más que el Tottenham Hotspur. A los de Ralf Rangnick les quedan siete partidos para intentar entrar en la máxima competición continental.

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