“El primer gol que recibimos en el minuto uno nos ha forzado a jugar más arriba, tuvimos ocasiones y el control del juego, pero no equilibrio. Y Neymar, Cavani y Mbappé son verdaderamente peligrosos”, señaló el técnico italiano en rueda de prensa.
Ancelotti justificó su decisión de no incluir a Franck Ribéry y a Arjen Robben en el equipo titular del Bayern Múnich porque había previsto “mucho control, mucha posesión” por lo que necesitaba “más jugadores en el medio”.
“Pensaba que podíamos ganar, es verdad que Ribery y Robben son grandes jugadores, estuvieron en el banquillo, pero en cada partido hay grandes jugadores en el banquillo”, dijo.
“Así es la vida en los grandes clubes, hay que dejar a grandes jugadores en el banquillo, es mi trabajo”, añadió.
Gol decisivo
“El perfil del partido cambió cuando recibimos el primer gol, el PSG dejó de jugar y se dedicó al contraataque”, continuó Ancelotti.
Cuando le preguntaron si el equipo francés le pareció más fuerte de lo que pensaba, dijo: “Sabía que era muy fuerte, muy peligroso, preparamos el partido para controlar el juego, pero no tuvimos equilibrio. Fue la clave porque encajamos demasiados contraataques”.
