El '7' blanco es un devorador insaciable y tras ganar la pasada Eurocopa con la selección portuguesa ya solo le queda el Mundial de Clubes como torneo en el que no ha brillado. En sus dos participaciones anteriores levantó el título, pero se marchó a casa sin haber contribuido decisivamente en las victorias.
En 2008, con el Mánchester United, Ronaldo llegaba ya a Japón como la gran estrella del momento (ese año ganó su primer Balón de Oro) y a pesar de que marcó el segundo gol en la victoria en semifinales ante el Gamba Osaka (5-3), el protagonismo se lo llevó su compañero Wayne Rooney, autor de dos goles ante los japoneses y del tanto en la final contra el Liga de Quito.
El portugués acabó como segundo mejor jugador del torneo, lógicamente detrás de Rooney.
Ya no fue hasta 2014, cuando Ronaldo, ya convertido en una estrella mundial, participó por segunda vez en el Mundial de Clubes, en esa ocasión en Marruecos.
El portugués disputó los 180 minutos del torneo, pero no marcó. Ni siquiera lo hizo en la goleada blanca en semifinales ante el Cruz Azul mexicano, un 4-0 con goles de Sergio Ramos, Karim Benzema, Gareth Bale e Isco.
Dos veces segundo mejor jugador
En la final, ante San Lorenzo de Almagro, volvieron a marcar Ramos y Bale (2-0) y CR7 se marchó de vacío a casa y sin el protagonismo que un jugador como él ansía.
Como en 2008, quedó de nuevo segundo en la elección al mejor jugador, siendo superado esta vez por su compañero Ramos.
En 2016, Ronaldo tiene al fin la oportunidad de brillar y acaparar los focos, aunque acostumbra a ser protagonista independientemente de sus logros en el césped.
Su entrenador, el francés Zinedine Zidane, no tiene dudas al respecto: “Tiene una motivación tremenda. Ya puede jugar un amistoso que siempre lo quiere ganar e, incluso, en los entrenamientos”, destacó.
Para Zidane, “no es exagerado” pensar que el portugués es el mejor jugador de la historia de la centenaria entidad madrileña: “Puede venir cualquier futbolista a jugar (al Real Madrid) y nunca más se va a conseguir lo que ha logrado él”.
De lograrlo sería el colofón a un año 2016 extraordinario, en el que ha ganado la Liga de Campeones y la Supercopa de Europa con el Real Madrid, la Eurocopa con Portugal y el Balón de Oro.
“Fue posiblemente el mejor año de mi carrera, tanto a nivel colectivo como individual”, dijo tras recibir el Balón de Oro.
La única mancha negra han sido las acusaciones de fraude fiscal a la Hacienda española destapadas recientemente por los documentos conocidos como 'Football Leaks'.
