Tras el éxtasis colectivo del oro olímpico en el Maracaná -comandado por el entrenador de las categorías de base, Rogerio Micale-, la nueva Seleao de Tite venció a Ecuador (3-0) y Colombia (2-1) hace apenas dos semanas, devolviendo la ilusión a una hinchada hastiada por los fracasos.
Satisfecho con un debut que, según él mismo, superó sus propias expectativas, el técnico convocó de nuevo al equipo titular que conquistó las dos importantes victorias, con Neymar y Gabriel Jesús brillando en el ataque.
Los cambios afectan a suplentes, que ahora dejan paso a varios pesos pesados recuperados para la causa.
Entre ellos destacan el centrocampista del Chelsea Oscar, olvidado desde hace meses, o Douglas Costa, del Bayern de Múnich, a quien una lesión le dejó fuera de la Copa América en junio.
El caso más simbólico es, sin embargo, el de Thiago Silva. Capitán del Brasil que cayó humillado en su Mundial, y una de las caras de la debacle, el zaguero perdió el brazalete con la llegada de Dunga, quien desde el principio construyó su proyecto alrededor de Neymar.
Arqueros: Alisson (Roma/ITA), Muralha (Flamengo), Weverton (At. Paranaense).
Zagueros: Miranda (At. Madrid/ESP), Marquinhos (PSG/FRA), Thiago Silva (PSG/FRA), Gil (Shandong Luneng/CHN).
Laterales: Daniel Alves (Juventus/ITA), Fágner (Corinthians), Marcelo (Real Madrid/ESP), Filipe Luis (At. Madrid/ESP).
Cetrocampistas: Casemiro (Real Madrid/ESP), Renato Augusto (Beijing Guoan/CHN), Paulinho (Guangzhou Evergrande, CHN), Oscar (Chelsea/ENG), Willian (Chelsea/GBR), Fernandinho (Manchester City/ENG), Lucas Lima (Santos), Giuliano (Zenit/RUS), Philippe Coutinho (Liverpool/ENG).
Atacantes: Neymar (Barcelona/ESP), Douglas Costa (Bayern Múnich/GER), Firmino (Liverpool/ENG), Gabriel Jesús (Palmeiras).
Pero su entrada definitiva en la lista negra se produjo después de la Copa América de Chile, donde un fallo suyo derivó en la eliminación de Brasil ante Paraguay.
“Tras ser invitado a asumir la selección, una de las primeras cosas que hice fue llamar a Marcelo y Thiago Silva. Quería sentir a los futbolistas y no citar hechos pasados”, afirmó Tite durante la conferencia de prensa de este viernes en Rio de Janeiro.
Todo por demostrar
En el cargo desde mitad de junio, tras la destitución de Dunga, muchos ven en Tite al salvador que vino a sacar a Brasil de la profunda depresión que le llevó a estar fuera de los puestos de clasificación para el Mundial-2018.
Una euforia que quiere contener ahora el técnico, consciente de que los profundos problemas que desdibujaron a la canarinha no se solucionan en un mes.
“No por vencer dos partidos todo está correcto. Precisamos clasificarnos para el Mundial y está todo muy apretado. Esa consolidación sólo podrá ser vista más adelante. Tenemos que tener mucha madurez, mucha consciencia”, aseguró.
Las señales, no obstante, son esperanzadoras. Los triunfos frente a Ecuador y Colombia, no sólo auparon a la hasta entonces decaída Seleao a la segunda plaza de la tabla, a un punto del líder Uruguay, sino que supusieron también el regreso goleador de Neymar, que tras un año sin marcar anotó en los dos partidos.
Con la intención de mantener en la lista al sancionado Paulinho, que no podrá jugar contra Bolivia, Tite convocó a 24 jugadores para los duelos que se disputarán el 6 de octubre en Natal y el 11 en Mérida ante Venezuela.
Otro doblete de victorias, combinado con un tropiezo de los charrúas, podría alzar a Brasil al liderato del Premundial para enfrentar rebosante de moral el primer gran examen de la era Tite: el clásico sudamericano contra Argentina del 10 de noviembre.
