Durante el control de su vehículo encontraron escondidos entre muebles a 10 inmigrantes afganos: cuatro hombres, dos mujeres, una de ellas embarazada, y cuatro niños.
Lokaso-Lokembo, de nacionalidad belga, nació hace 33 años en Kinsasa y su carrera como futbolista profesional se extendió de 2001 a 2009 en Bélgica, luego en Israel y finalmente en Chipre, en equipos como el Sporting de Charleroi belga o el chipriota AEK Larnaca.
Al final de su carrera, según recordó “La Voix du Nord”, acumuló deudas que sobrepasaron los €40 mil, y también ha tenido problemas con la Justicia belga, uno de ellos por tráfico de drogas, que le valió tres meses de cárcel en 2012.
Tanto en su detención como en su juicio en Dunkerque este lunes, el exjugador reconoció los hechos.
“En Bruselas, un tal Malik me propuso entregar unos muebles a Inglaterra, pero en ese momento no tenía idea de lo que contenían. Al llegar a Calais, conocí a un tal Al, quien me puso al corriente en el último momento y me propuso llevar a esas diez personas a cambio de €1 mil por cabeza” , alegó.
El exfutbolista dijo haber aceptado por sus problemas económicos: “Todo pasó muy rápido. Tengo muchas deudas y estoy bajo presión, por eso acepté. Nunca había hecho esto antes y, sinceramente, me arrepiento ya que yo no soy así”, dijo en ese proceso, en el que se le prohibió también pisar el territorio francés durante 3 años.