Apartado del primer equipo desde que pronunciara los insultos el pasado día 13, el castigo parece bajo, tras haber visto el cabreo que habían provocado en su entrenador, a quien llamó “mariquita” .
El PSG mostró su deseo de que Aurier “celebre pronto con sus compañeros y con los aficionados la cuarta liga consecutiva” del equipo, al tiempo que reafirmó su confianza en su cuerpo técnico y en su plantilla.
Algunos medios señalaban que Aurier podía haber sido incluso despedido por esos hechos, considerados de graves por Blanc.
A través de una red social de retransmisión en directo de vídeos, Aurier llamó el pasado día 13 “mariquita” a Blanc, cuestionó la autoridad del sueco Zlatan Ibrahimovic en el vestuario, calificó de “guiñol” al argentino Ángel di María y consideró que el portero suplente Salvatore Sirigu está “quemado” .
El jugador pidió perdón a algunos de sus compañeros y recibió el apoyo de, entre otros, el centrocampista Blaise Matuidi, amigo personal del marfileño y considerado uno de los pesos pesados del vestuario.
“Es mi amigo y es amigo de todo el vestuario. Todo el mundo le aprecia. Sabemos que ha cometido un error, es algo humano, ha pedido perdón (…) Le necesitamos en el campo y fuera” , dijo Matuidi tras la victoria de su equipo el pasado sábado contra el Rennes.
Blanc, que confesó que le habían sentado muy mal las palabras de Aurier, a quien consideró “un desagradecido” , afirmó que tendrá una entrevista con el jugador y no le cerró las puertas del vestuario.
Resta por ver como recibirán a Aurier los otros pesos pesados del vestuario, como el sueco Ibrahimovic, el argentino Di María o el brasileño Thiago Silva.