El equipo de Laurent Blanc dominó con puño de hierro todas las competiciones del país galo, por eso, todo lo que no sea una victoria parisina será una gran sorpresa en el panorama futbolístico francés.
“El objetivo a principio de temporada era ganar todos los títulos. Este partido puede poner punto final a una gran temporada para nosotros. Tenemos la posibilidad de hacer historia” , dijo el portero Nicolas Douchez, titular en las copas nacionales en detrimento del italiano Salvatore Sirigu.
El PSG, uno de los clubes más poderosos del mundo, busca su novena copa de Francia, la primera desde 2010. Frente a ellos, el Auxerre, un histórico del fútbol francés, que sobrevive en la segunda división.
El club de Borgoña terminó noveno en su tercera temporada consecutiva en la Ligue 2. El Auxerre ganó cuatro veces la copa francesa entre 1994 y 2005, pero esos días de gloria parecen más lejanos que nunca.
Tras eliminar al vigente campeón Guingamp, el Auxerre encadenó siete derrotas consecutivas para finalizar la campaña, mientras que el PSG acabó la temporada con nueve victorias seguidas y con un inspirado Edinson Cavani.
El delantero uruguayo fue el gran protagonista de este esprint final parisino anotando doce goles en los últimos ocho encuentros.