La hinchada madridista se la regalará encantada: el díscolo e incontenible Piqué siempre fue su albo preferido. Por su desacomplejado barcelonismo. Por sus posturas políticas. Por su incorrección política, también.
“A mí, lo que no me gusta del Madrid es ver las personalidades que hay en el palco y cómo mueven los hilos de este país (allí)”, afirmó Piqué el pasado marzo, tras el último amistoso con la selección española ante Francia.
Contra los mismos equipos. 8 puntos. 8 y tal. Los recortes son de prensa de Madrid por la duda. pic.twitter.com/nZUDgrjuVd
— Gerard Piqué (@3gerardpique) February 26, 2017
La pregunta inicial que le habían hecho versaba sobre el videoarbitraje. El central catalán la llevó al terreno que quería y respondió: “Al final, todo se resume en ir vestido de blanco”.
España lucía el uniforme blanco ese día y Piqué lo aprovechó para denunciar, una vez más, los supuestos favores arbitrales que recibe el Real Madrid.
Sus comentarios incendiaron las redes sociales, fueron titular en todos los medios de comunicación y alimentaron la habitual guerra dialéctica que mantiene con Sergio Ramos, capitán del Real Madrid y compañero suyo en la selección.
No se quedó callado
“Nada nuevo, no me sorprende. Pero que Piqué rebobine un poco, que se ponga el partido del PSG y los tres puntos se le quedarán cortos”, le replicó Ramos el pasado martes, después de que Piqué tuiteará tres puntos suspensivos en alusión al controvertido arbitraje del Real Madrid-Bayern Múnich de la Liga de Campeones europea.
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— Gerard Piqué (@3gerardpique) April 18, 2017
El central del Barcelona hizo oídos sordos. Y el pasado jueves, después de que el diario español “Marca” lanzara una encuesta preguntando a sus lectores si les parecía bien que la hinchada azulgrana hubiese aplaudido a los suyos tras la eliminación de la Champions ante la Juventus, tuiteó: “Escuece ver cómo el Camp Nou aplaude a su equipo a pesar de quedar eliminado. Están acostumbrados a los silbidos, a pesar de clasificarse…”.
Escuece ver como el Camp Nou aplaude a su equipo a pesar de quedar eliminado. Están acostumbrados a los silbidos, a pesar de clasificarse… pic.twitter.com/FI0B6z1Nwp
— Gerard Piqué (@3gerardpique) April 20, 2017
Un nuevo dardo dirigido al Real Madrid, a su juego y a su hinchada, días antes de que el Barcelona visite el Santiago Bernabéu para jugarse casi todas sus opciones a seguir luchando por la Liga.
Y es que Piqué, como su entrenador Luis Enrique, se crece ante hostilidad rival.
