Los rojiblancos buscaban una victoria que les asegurara el pase a octavos y ahora se jugarán el primer puesto del grupo D en las dos últimas jornadas con el Bayern de Múnich, que ganó este martes 2-1 al PSV Eindhoven.
A los rojiblancos les costó entrar en un partido en el que el Rostov, lejos de quedarse a la defensiva, empezó también presionando, aunque en el segundo tiempo dio un paso atrás y el partido fue un monólogo del Atlético, pero sin lograr encontrar la portería contraria.
Al cuarto de hora del encuentro, el ecuatoriano Christian Noboa se sacaba un tiro que detuvo el portero del Atlético, Jan Oblak (15).
Fue la oportunidad más clara del equipo visitante, último clasificado de la llave D, hasta que llegó el gol de Azmoun.
El Atlético intentó llevar el peligro por la banda izquierda con las llegadas del belga Yannick Carrasco y del brasileño Filipe Luis.
El Atlético de Madrid, que este martes ganó por 2-1 al Rostov ruso en el estadio Vicente Calderón, aseguró su participación en los octavos de final de la Liga de Campeones, una fase que disputará por cuarta vez consecutiva, algo que no había conseguido nunca antes en su historia.
Carrasco, autor del gol hace quince días en Rusia, apareció en el 17 para recibir en carrera un balón de Griezmann y disparar un tiro que despejó el meta Soslan Dzhanaev.
Pero, los rojiblancos tuvieron que esperar hasta el 28 para marcar cuando Griezmann remató de espaldas y a la media vuelta con el exterior un pase al área de Filipe Luis.
La alegría, sin embargo, duró poco porque dos minutos más tarde, Dmitry Poloz metió un balón en profunidad a Azmoun que batió a Oblak (30), que recibió así su primer tanto esta temporada en Champions.
Gameiro, cambio ofensivo
El partido se fue al descanso con el empate y a la vuelta, el técnico Diego Simeone decidió dar más pólvora a su equipo introduciendo a Kevin Gameiro por Saúl íguez (58).
El Atlético se fue así para adelante con Gameiro, Fernando Torres, Griezmann y Carrasco, que sería posteriormente sustituido por el argentino ngel Correa (79).
El segundo tiempo empezó con un tiro de Koke desde la frontal que detuvo el arquero (48), iniciando lo que fue un completo asedio del Atlético a la portería contraria.
Los rojiblancos se estrellaron una y otra vez contra la defensa del Rostov, que en la segnda parte, se dedicó a defenderse buscando sólo el contraataque para crear peligro.
En los últimos minutos, Gameiro soltó un disparo desde la frontal que detuvo bien el portero del Rostov (82), pero cuando parecía que el partido iba a acabar con empate volvió a aparecer Griezmann.
El delantero francés volvió a cazar un balón en el área para rematar a la red rusa levantando el balón por encima del portero y hacer el 2-1 definitivo (90+1).